Detienen en Madrid a los autores del secuestro de un niño
El rescate solicitado era de 300.000 euros. Tras 48 horas de negociaciones, la entrega quedó fijada en la mitad. La policía frustró el pago y el niño ha sido liberado
Agentes de Policía Nacional han detenido a Jie L., de 23 años, y Cheng Guo Z., de 24, acusados de asociación ilícita, detención ilegal e infracción a la Ley de Extranjería. El arresto tuvo lugar en el momento en que pretendían cobrar los 150.000 euros que habían acordado con los padres, para entregar a continuación al menor.
Los hechos tuvieron lugar el jueves dos de octubre. A bordo de una furgoneta, dos individuos interceptaron a un menor, de 13 años y nacionalidad china, en la localidad de Pinto. Ese mismo día, los secuestradores se pusieron en contacto con los padres y solicitaron la cantidad de 300.000 euros como condición para liberarlo.
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Transcurrieron 48 horas, en las que hubo numerosos contactos telefónicos y negociaciones. Finalmente se pactó que fuera un tío del menor el que materializara la entrega del dinero, fijado ahora en 150.000 euros. Los secuestradores citaron a este familiar en la plaza de Atocha. Le facilitaron entonces indicaciones con nuevos destinos y, tras una hora al volante, fue emplazado en el mercado de la plaza de España. Estacionado allí, dos individuos accedieron al interior de su vehículo e indicaron al conductor que reiniciara la marcha. El destino final fue el paseo de Extremadura, donde el menor esperaba custodiado.
Los agentes camuflados no fueron detectados por los secuestradores. Entonces procedieron a la liberación del menor y al arresto de los dos secuestradores allí presentes: Jie L. y Cheng Guo Z., ambos con antecedentes por delitos contra la propiedad intelectual y la Ley de Extranjería.
Las investigaciones continúan abiertas pues, de acuerdo con las informaciones obtenidas hasta el momento, resta por detener a otros dos compatriotas que se encargaron de las primeras vigilancias para conocer los movimientos y horarios del menor, así como de su custodia en los primeros momentos, al parecer, en una pensión del centro de Madrid.