'Máximo nivel de alerta' en el perímetro fronterizo de Melilla tras la avalancha de inmigrantes
Unas 150 personas de origen subsahariano intentan cruzar el puesto fronterizo de Beni-Enzar aunque ninguno de ellos consigue su propósito tras ser repelidos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la policía marroquí
La Delegación del Gobierno en Melilla mantiene el "máximo nivel de alerta" en la vigilancia del perímetro fronterizo que separa la ciudad autónoma y Marruecos, después de la avalancha sufrida esta noche. Unas 150 personas de origen subsahariano han intentado cruzar el puesto fronterizo de Beni-Enzar. Ninguno de ellos lo ha conseguido tras ser repelidos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la policía marroquí.
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El delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, ha informado de que 36 agentes de la Guardia Civil de los Grupos Rurales de Seguridad (GRS) que llegaron hace una semana a Melilla por los intentos de avalancha tras las fuertes lluvias siguen reforzando el perímetro fronterizo, donde la situación actual es de "absoluta normalidad".
Asimismo, un helicóptero de la Guardia Civil mantiene la vigilancia permanente para localizar y prevenir intentos de entrada masiva de inmigrantes a Melilla.
"A pesar de la situación excepcional en la que nos encontramos, hay que destacar que los refuerzos de la frontera han impedido que estos intentos lleguen al éxito", ha dicho Escobar.
El delegado del Gobierno ha argumentado que el aumento de los intentos de entrada masiva de subsaharianos que se ha registrado en las últimas dos semanas se deben a las fuertes lluvias caídas en Melilla a finales de octubre, que han dañado las vallas de la línea fronteriza.