Pensión de 3.500 euros y "ropa cara" para el hijo de un matrimonio divorciado
El padre posee en gran patrimonio inmobiliario e ingresos elevados pero <b>ofrecía 300 euros de pensión</b>. El juez Francisco Serrano lo condena a que también pague un colegio bilingüe
Un juez de Sevilla ha fijado a un padre separado una pensión de 3.500 euros para su hijo. El magistrado considera que es la forma de garantizar que el niño no decida en un futuro vivir con su padre sólo porque tiene más dinero.
El padre de este niño es un afamado catedrático, adinerado y a punto de jubilarse. El juez, Francisco Serrano, autor de polémicas sentencias, ha justificado en que no sólo ha tenido en cuenta los ingresos, que superan los 71.000 euros, sino también su enorme patrimonio inmobiliario.
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Entre las consideraciones del fallo, además del monto mensual que deberá destinar como pensión, se incluye que el niño disponga de servicio doméstico, educación privada bilingüe, "ropa cara" y "atención sanitaria privada".
A pesar de la polémica sentencia, el padre separado había ofrecido sólo 300 euros mensuales para la manutención del menor, que hoy tiene dos años.
El juez Serrano justifica la decisión de cara al futuro del niño y teniendo en cuenta el enorme desequilibrio económico entre el padre y la madre. Para el magistrado, cuando el niño crezca podría optar por "puro y libertino capricho" vivir con su padre, sólo por razones económicas. "Confunden su verdadero interés con el de una voluntad manipulada, alienada y marcada por puro capricho" asegura el juez.
Serrano considera casi "ofensivo" que el padre ofrezca la cifra de 300 euros mensuales y así se desentienda de sus responsabilidades. El juez considera que el cumplimiento de la sentencia, aunque parezca exagerado, sólo implicaría que el padre deba desprenderse de una "ínfima" parte de su patrimonio.