Al menos 30 personas mueren y más de 160 resultan heridas en un atentado contra un centro chií

Al menos 30 personas han muerto y unas 160 se encuentran heridas tras un atentado suicida perpetrado contra un centro religioso chií de la localidad de Chakwal, a 90 kilómetros al sureste de la capital, Islamabad, según han informado fuentes policiales. El terrorista ha activado los explosivos que llevaba cuando los agentes de seguridad del lugar, que también se encuentran entre los muertos, han intentado detenerle en la puerta del centro Imambargah, donde se celebraba la festividad de Majlis Aza a la que asistían unas 2.000 personas. Por otra parte, al menos 18 milicianos han muerto en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad al noroeste del país.

De entre los heridos, unos 15 o 20 se encuentran en estado crítico y han sido trasladados al Hospital Sede del Distrito, ha explicado un agente. Pese a que la información procede de fuentes policiales es confusa porque varios testigos, citados por la agencia de prensa paquistaní APP, han afirmado que en realidad la bomba estaba colocada en una motocicleta aparcada cerca de la puerta del edificio.

Por su parte, el primer ministro paquistaní, Yusuf Raza Gilani, ha jurado que derrotará al terrorismo. En declaraciones a los medios locales, ha afirmado que se va a establecer un comité que incluya a todos los partidos del Parlamento para luchar contra esa lacra. Además, ha pedido a todas las fuerzas políticas que se unan para "rescatar" al país, que se encuentra inmerso en una "ola de terrorismo" en las que participan, además, "chechenos, árabes y uzbecos".

Otro atentado sangriento

Al menos 17 civiles fallecieron, entre ellos cinco niños, en un atentado suicida destinado contra un convoy militar que se dirigía al cuartel general del Ejército paquistaní en la localidad de Miranshah (Waziristán del Norte), poco después de que un presunto ataque aéreo estadounidense dejara 13 muertos, algunos de ellos civiles, a escasos kilómetros del lugar de este atentado.

El asaltante conducía un vehículo cargado con explosivos que pretendía estrellarse contra el convoy. Las tropas paquistaníes abatieron al conductor con disparos que hicieron detonar el vehículo, que explotó cerca de un colegio donde los padres estaban recogiendo a los alumnos que salían de clase, según fuentes oficiales a la cadena paquistaní Geo TV.

Horas después, murió una persona y otras quince resultaron heridas en un atentado suicida cerca de un puesto de control del Cuerpo de Fronteras en Islamabad. Tras la explosión se produjo un tiroteo entre las fuerzas de seguridad y asaltantes no identificados que se habían refugiado en una casa cercana. "La explosión fue un atentado suicida", indicó a Geo un miembro del citado cuerpo de seguridad.