Un video pide la expulsión de los gitanos
Un partido ultraderechista checo emite un video en el que pide la solución final para la cuestión gitana
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El video ha causado la indignación del gobierno de la República Checa y de distintas organizaciones de derechos humanos. El ministro de Derechos Humanos y Minorías, Michael Kocab, consideró que ese vídeo del Partido Nacional (PN) para las elecciones europeas era `absolutamente escandaloso y una violación de los derechos humanos y la libertad´.
El vídeo comienza con la imagen de tres borregos blancos sobre una bandera checa, mientras uno de ellos expulsa de una patada a una cuarta oveja negra.
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Esa imagen es muy parecida a la de los polémicos carteles electorales de la Unión Democrática de Centro (UDC), un partido ultranacionalista suizo que utilizó esa publicidad en las elecciones generales de 2007.
El vídeo continúa con imágenes denigrantes de la población gitana con lemas como `no queremos más parásitos´ y `stop a dar prioridad a los gitanos´.
El primer ministro de la República Checa, Jan Fischer, considera que el extraparlamentario PN ha cometido un crimen de incitación al odio racial y difamación de una comunidad.
La vicepresidenta de Los Verdes, Katerina Jacques, solicitó que se discutiese la posible ilegalización de la formación ultraderechista.
La polémica se ha avivado tras conocerse que el anuncio fue emitido de forma gratuita en la televisión estatal dentro de los espacios cedidos para la campaña de las elecciones al Parlamento Europeo.
El Partido Nacional ha calificado de `reacción histérica´ la respuesta a su vídeo y ha asegurado que la referencia a `la solución final´ no busca acabar con la población romaní, sino repatriarles a su país de origen.
Actualmente la minoría romaní en República Checa se cifra en unas 250.000 personas.
Polémica con los gitanos también en Rumanía
Esta misma semana los medios de comunicación rumanos cargaron contra el rotativo italiano `Il Giornale´ por referirse al entrenador rumano del equipo campeón de la UEFA, Shaktar Donest, como `el gitano rumano del banquillo´.
La prensa rumana considera que el apelativo `gitano´ es un insulto y lo comparan con los gritos racistas dirigidos al delantero rumano de la Fiorentina Adrian Mutu en distintos partidos de la liga italiana.
