Hillary Clinton: "Mi marido no es el secretario de Estado, lo soy yo"
Responde enfadada a una pregunta mal traducida del francés de una estudiante en Congo
Responde con cierto tono de irritación al ser preguntada por la opinión de Bill Clinton respecto a un hipotético pacto entre China y la República Democrática del Congo. / CNN+
Todo se debió a un mal entendido, según han aclarado los medios estadounidenses. Hillary Clinton respondió muy enfadada ante la pregunta de un estudiante en Kinsasha, África, sobre la opinión de marido en un asunto de política exterior. Clinton respondió a la pregunta que el traductor le trasladó, aunque éste hizo, aparentemente, el trabajo con poca fortuna. El estudiante alzó la mano para preguntar a Hillary Clinton qué opinaba el presidente Obama sobre los contratos financieros de China con Congo. Pero el traductor cometió un grave error y en lugar de decir "Obama", dijo "su marido, Clinton".
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La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, al escuchar esta pregunta, hizo valer su cargo y aclaró que ella es quien ejerce como encargada de Exteriores y se negó a actuar como portavoz del ex presidente Bill Clinton.
"Mi marido no es el secretario de Estado, lo soy yo", respondió con cierto tono de irritación al oír la pregunta. "Si quiere mi opinión, le diré mi opinión", pero "no voy a ser el canal de mi esposo", respondió muy enfadada la jefa de la Diplomacia norteamericana.
De esta forma, Hillary ha salido por primera vez al paso del protagonismo que en las últimas semanas le ha robado su esposo, especialmente después de que el ex presidente consiguiese mediante un viaje sorpresa la liberación de dos periodistas estadounidenses condenadas en Corea del Norte. El viaje de Bill Clinton se produjo coincidiendo con el arranque de la visita a África de su mujer.
Sin embargo, fuentes cercanas a la secretaria de Estado afirman que tras el encuentro con los estudiantes, Hillary mantuvo una amistosa conversación con el estudiante que tuvo la mala fortuna de que su pregunta en francés no fuera bien traducida a la lengua de Clinton.
