Cuatro millones de discapacitados en España
Nueve de cada diez declara no sentirse discriminado
En España hay casi cuatro millones de personas con alguna discapacidad, según la encuesta que ha publicado esta mañana el Gobierno. Nueve de cada 10 declara no sentirse discriminado. A pesar de que la mayoría de las personas discapacitadas encuentra barreras en el hogar, en su edificio, en la calle y en el transporte público, el 90% no se siente víctima de discriminaciones directas. Los enfemos mentales son los que manifiestan sufrir discriminación constantemente.
Más información
Del total de discapacitados en nuestro país, más de dos millones reciben algún tipo de servicio social o sanitario, pero hay un 8%, unas 200.000 personas, que no reciben ayuda a pesar de necesitarla. Según la encuesta, elaborada por el INE, más de cuatrocientos mil discapacitados estan trabajando.
Más mujeres afectadas
Por sexos, el análisis del INE concluye que el porcentaje de mujeres que se ven afectadas por alguna discapacidad "es superior al de los hombres" (60%) y que son además "las que tienen más dificultades para afrontar los retos de la vida cotidiana". Así, el 58,5% de ellas reconoce que tiene problemas de accesibilidad, especialmente en el interior de su vivienda y en los accesos al edificio.
Por comunidades autónomas, Galicia presenta la tasa más elevada de personas con discapacidad (112,9 por cada 1.000 habitantes), mientras que la más baja se da en la La Rioja (61,1 por cada 1.000). Para la ministra, "ciertas variables como la población más envejecida, su dispersión o el carácter rural de la región pueden determinar estas diferencias".
Para el presidente del CERMI (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad), Luis Cayo, estos datos "son optimistas" y reflejan que la realidad del sector mejora día a día. A su juicio, la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia ha posibilitado este cambio, "convirtiendo las necesidades de estas personas en derechos". No obstante, apuntó que "siguen existiendo estigmas y dificultades que ralentizan su aplicación".
