Los Pishtacos de Huanuco
Este viernes ha sido detenida una banda peruana de la región de Huánuco que tras matar y descuartizar a seres humanos les colgaban con ganchos para sacar la grasa y venderla a 15.000 dólares el kilo
Entre 60 y 200 personas han sido asesinadas con la Wincha, una caja de la que salía una guadaña que decapitaba a las personas. Con la cabeza separada del cuerpo, este aun andaba unos pasos.
La leyenda de los Pishtacos se ha convertido en realidad... Una banda peruana que actuaba en Huanuco y usaban la grasa humana para venderla ha sido detenida por la policía cuando pretendían retirar una de las botellas que contenía grasa en una agencia de transporte.
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Seguían un ritual que consistía en colgar los cadáveres descuartizados en ganchos y encendían velas para que chorreara el tejido adiposo. La recogían en botellas vacías y las vendían por un precio que oscilaban los 15.000 dólares. El ritual también constaba de mujeres que lloraban y velaban los cadáveres para evitar que el alma del muerto se quedase.
Supuestamente la grasa se había utilizado para la fabricación de cosméticos en Europa y para productos anticancerígenos. No se sabe exactamente cuantas personas han sido victimas de estos asesinatos. Durante décadas se ha hablado de los Pishtacos como leyenda hasta hace dos semanas que se produjeron las primeras detenciones.
La banda llevaba más de treinta años actuando
Milenio 3 ha contactado con Jorge Mejía, Coronel de la división de secuestros de la Policía Nacional de Perú. Además ha contado con la ayuda del Doctor Forense, José Cabrera para saber más sobre la grasa humana y con el periodista Juan Rada.
