España le pide a Marruecos que atienda el pedido de la UE sobre Haidar

La presidencia de turno sueca y el representante español, el embajador ante el Comité Político y de Seguridad de la UE (Cops), Carlos Fernández, expresaron la "enorme preocupación" por la situación de Aminetu Haidar y pidieron al Gobierno de Marruecos y al ministro marroquí, que "responda" a la petición de la UE de "encontrar una solución".

España pidió al Gobierno marroquí, durante la reunión del Consejo de Asociación entre la UE y Marruecos celebrada en Bruselas, responder a la petición de la UE de encontrar una solución al caso de la activista saharaui Aminetu Haidar, según explicó el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos.

Según el jefe de la diplomacia española, que no estuvo presente en la reunión con Marruecos, la presidencia de turno sueca y el representante español, el embajador ante el Comité Político y de Seguridad de la UE (Cops), Carlos Fernández, expresaron la "enorme preocupación" por la situación de Aminetu Haidar y pidieron al Gobierno de Marruecos y al ministro marroquí, que "responda" a la petición de la UE de "encontrar una solución".

"Por lo tanto, vamos a seguir llevando a cabo gestiones en Naciones Unidas y con todos los actores principales que pueden tener una influencia y un impacto en resolver este caso, y vamos a seguir trabajando", aseguró Moratinos a su llegada al Consejo de Asuntos Generales (CAG) de la UE.

Hoy, tanto la comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, como el secretario de Estado sueco de Relaciones Exteriores, Frank Belfrage, cuyo país ocupa la presidencia de turno de la UE, expresaron la "preocupación" de los Veintisiete por la "situación dramática" de la activista saharaui, que cumple tres semanas en huelga de hambre, y confiaron en que se logre una solución "política o humanitaria de compromiso".

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Por otra parte, Moratinos matizó que el Gobierno hizo el pasado viernes una "doble" gestión para hacer posible que Haidar regresara a El Aaiún: una gestión "política" de petición del vuelo y al mismo tiempo una gestión "técnica" de la propia compañía que estaba contratada por la Agencia Española de Cooperación.