Sociedad

El piloto de los "vuelos de la muerte" acepta ser extraditado a Argentina

El piloto, que también tiene nacionalidad holandesa, fue detenido durante una escala de cuarenta minutos de un vuelo que finalizaba en Amsterdam

El ex militar argentino Julio Alberto Poch, detenido el pasado 22 de septiembre en Manises (Valencia) por su presunta participación en los "vuelos de la muerte", ha aceptado este miércoles su extradición a Argentina, donde ha pedido tener un "juicio justo" porque se considera víctima de una "jugada política" de Holanda.

Poch compareció el pasado mes de octubre ante el juez titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Eloy Velasco y negó su participación en los hechos, además de expresar su deseo de no ser extraditado a Argentina. Sin embargo, hoy ha cambiado de parecer y ha aceptado su traslado

Más información

En un escrito hecho público el lunes, la Fiscalía de la Audiencia Nacional muestra su conformidad con las autoridades del país suramericano para que el detenido les sea entregado. Considera que la jurisdicción del caso corresponde a Argentina en virtud del principio de territorialidad, al haberse producido allí los hechos que motivaron la reclamación.

Por su parte, el piloto declaró ante el juez Velasco el pasado mes de octubre que sus compañeros le "malinterpretaron" cuando supuestamente alardeó de haber participado en este tipo de misiones. Tras tomarle declaración, el juez instructor confirmó la prisión provisional, comunicada y sin fianza de Poch, que fue decretada por el juez de Quart de Poblet (Valencia).

Las autoridades argentinas reclaman a Poch por su presunta implicación en cuatro procesos penales en los que se investigan detenciones ilegales, torturas y desapariciones cometidas entre los años 1976 y 1983, periodo en el que habría sido aviador naval con base en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).

Último vuelo antes de jubilarse

Poch, que efectuaba su último vuelo como piloto comercial antes de jubilarse cuando fue detenido en el aeropuerto de Manises (Valencia), aseguró ante el juez que no tiene "nada que ver" con los ''vuelos de la muerte'' porque "nunca" estuvo destinado en la ESMA, según explicó a la salida del juzgado su abogado, Ignacio Pélaez.

El piloto, que también tiene nacionalidad holandesa, fue detenido durante una escala de cuarenta minutos de un vuelo que finalizaba en Amsterdam (Holanda). Desde su arresto, fue encarcelado en el centro penitenciario de Picassent (Valencia).

La Fiscalía apunta que "en Argentina se encuentran las pruebas y no consta que en España se haya seguido juicio por los mismos hechos", y también subraya que la reclamación de las autoridades argentinas "no tiene motivación política, ni los delitos tienen tal carácter".