Grecia presenta un plan de austeridad para cinco años

Grecia decide apretarse el cinturón con un plan de ajuste que no tiene precedente alguno. El objetivo de todas las medidas es lograr que el déficit se sitúe por debajo del 3% en el año 2014 frente al 13, 6% en el que se está ahora. Esto se traduciría en un ahorro de 30.000 millones de euros.

El primer ministro griego, Georgios Papandreu, ha pedido a sus compatriotas que escojan "entre sacrificio o bancarrota". Y el sacrificio se traduce en un paquete de medidas de absoluta austeridad. Por una parte, se plantea la subida de impuestos. En este apartado, todos los tipos del IVA subiran un 2%, situándose en el 23% en lo que supone la segunda subida de este impuesto este año; se establece un impuesto adicional del 10% en tabaco, bebida y combustibles y se aumentará la tributación de aquellas empresas que presenten beneficios. En el campo empresarial se han anunciado más medidas, pero no se han dado detalles.

Por otra parte, se acometerá un recorte en los salarios de los funcionarios, a los que se les dejará de entregar dos pagas extraordinarias, y también se bajarán las pensiones y las contrataciones públicas.

Este drástico plan, que cuenta con la oposición de los ciudadanos y de los sindicatos helenos, es el punto de partida para que los países de la Zona Euro y el Fondo Monetario Internacional decidan finalmente dar luz verde al plan de rescate financiero.

El Banco Central Europeo, respaldó el plan aprobado por Grecia para reducir su déficit público por debajo del 3% del PIB en 2014 y evitar así el riesgo de quiebra pero le reclamó que prepare "más medidas" de ajuste en caso de que sean necesarias para cumplir los objetivos de este programa. "El Consejo de Gobierno también considera esencial que las autoridades griegas estén preparadas para adoptar cualquier medida adicional que pueda resultar adecuada para alcanzar los objetivos del programa", dijo el Banco en un comunicado.

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"El ambicioso ajuste fiscal y las completas reformas estructurales que prevé el programa son adecuados para lograr los objetivos de estabilizar la situación económica y fiscal y para hacer frente a los retos fiscales y estructurales de la economía griega", prosiguió el BCE. La autoridad monetaria aseguró que el plan griego "ayudará a restaurar la confianza y salvaguardad la estabilidad financiera en la eurozona".