Alonso ganará el mundial

Pocas veces en Ferrari se ha vivido un cumpleaños tan triste. La carrera 800 en F1 arrojó una conclusión desalentadora: Red Bull sigue lejos pero ahora McLaren también lo está, Mercedes se ha colocado por delante y el nivel de pelea se sitúa con Renault.

Las 8 décimas que separan a los bólidos rojos de los austriacos y las balas de plata van a ser muy difícil de neutralizar. Los datos son demoledores en contra de Ferrari: en 3 de 7 carreras Alonso ha quedado fuera de la Q3, sólo ha logrado 12 puntos en las últimas 2 carreras y en Istambul Park ha llegado a ¡46 segundos! de Hamilton. Que Petrov, Kobayashi y Sutil queden por delante de un bicampeón del mundo pilotando un Ferrari sin problemas aparentes es difícil de comprender y de asimilar.

Si juegas con fuego demasiado tiempo, al final acabarás quemándote y Ferrari no puede permitirse más errores ni más conservadurismo en la evolución del F10. Hay que ir a por todas ya. McLaren ha metido un gol por toda la escuadra a la escudería de Maranello y la reacción debe ser inmediata. De momento, deben incluso dar gracias de que Red Bull, por diversas causas, esté desperdiciando su incontestable dominio: sólo 3 de las 7 poles se han convertido en victorias.

Dicho lo cual, y a pesar de las pésimas sensaciones que nos ha dejado la actuación en Turquía, es buen momento para apostar por una victoria de Fernando en el Mundial. No es un acto de prepotencia (no están las cosas como para presumir mucho) sino de fe en el talento de Alonso y en la capacidad de superación de Ferrari. Los grandes hombres son los que se levantan después de haber caído. Él se levantará y Ferrari despertará de su letargo. Lo mejor está por llegar.