Portugal decepciona en su estreno en Sudáfrica

La selecciones de Costa de Marfil y Portugal empataron en su estreno mundialista en un partido en el que los africanos ofrecieron mucho más ante una selección lusa que decepcionó y se fue diluyendo.

En el partido vital para ambos combinados, que 'a priori' luchan por el segundo puesto del grupo por el favoritismo de Brasil, los marfileños no vieron recompensada su ambición. Cristiano prolongó su sequía con su selección, con la que lleva más de dos años, desde la Eurocopa de 2008, sin marcar en partido oficial. El '7' no dudó en erigirse en protagonista desde el primer minuto, pero en su primera arrancada Zokora le paró en seco con una dura patada, con apenas siete minutos disputados. Menos de cinco después el luso soltó un derechazo que se estrelló en el poste derecho y que fue la mejor y casi la única ocasión del partido para los lusos.

El madridista sabía que era el hombre a parar para los marfileños. El temperamento de Cristiano, sobradamente conocido ya, le enzarzó en una discusión con Demel que terminó con una amarilla para cada jugador. Además, ansioso por quebrar su mala racha y presionado la responsabilidad, Ronaldo no terminó de encontrar su sitio, y otra falta dura acabó por opacarle. Y tampoco sus compañeros estuvieron finos del centro del campo hacia adelante. Las faltas y la presión constante en la zona del círculo central ralentizaron el juego y los pocos balones que llegaron al área lo hicieron ya con los porteros colocados y desbaratando sin problemas todas las opciones.

Los 'Elefantes', sin su estrella Drogba, nervioso en el banquillo, ofrecieron más ante unos jugadores portugueses que se encomendaron sólo a su astro, que desapareció con el paso de los minutos y sin compañía de sus paisanos.

En la segunda parte, los marfileños, viendo que la contención estaba asentada, comenzaron a lanzarse al ataque con más alegría. Gervinho, tras una gran jugada personal que Eduardo despejó a corner, y Kalou o Dindane, probaron al meta de los 'tugas'.

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Ante la inoperancia ofensiva, Queiroz dio entrada a Simao, pero fue Deco el que -por fin, tras 60 minutos de oscuridad-, puso una pelota franca al área, pero el cabezazo de Liedson lo atajó Barry. Fue el aperitivo de otras dos acciones de peligro de los de Sven Goran-Eriksson, previas a la aparición de Drogba sobre el verde, que la tuvo en sus botas en el descuento, pero que no pudo quebrar el empate sin goles.