El decreto de la reforma laboral, bastante más fácil que el 'pensionazo' para el Gobierno

La secuencia es bien distinta. El 28 de mayo, el gobierno lograba convalidar sus medidas de ajuste del gasto y reducción del déficit público con la mínima diferencia de un voto; de cara a la convalidación del decreto ley que contiene la reforma laboral, el riesgo se ha reducido a la mínima expresión.

El PSOE, aparte de contar con sus propios votos para -en el peor de los casos- sacar adelante este otro decreto con sus 169 'síes', sabe ya que, esta vez, el PNV -seis escaños- opta por la abstención. Y cuenta, también, con que "facilitar" la convalidación del decreto signifique, por parte de Convergència i Unió, diez votos más si no por el "sí" junto a los socialistas, cuando menos también a la abstención.

Es probable que hasta los tres escaños de Eskerra Republicana de Catalunya se separen del "no" del grupo de izquierda y se sumen a la larga lista de la abstención. Lo que también ha de quedar claro este martes, en la Junta de portavoces de la mañana, es cómo se tramita el proyecto de ley de reforma laboral.

El gobierno lo quiere tan urgente como para que concluya el mes que viene. La votación no tendrá lugar antes de las nueve de la noche.