El Supremo avala la instalación de micrófonos en los calabozos
El Alto Tribunal confirma la condena de más de 30 años de cárcel a unos jóvenes por los delitos de secuestro y asesinato
El Alto Tribunal confirma la condena de más de 30 años de cárcel a unos jóvenes por los delitos de secuestro y asesinato. La principal prueba de cargo fueron las conversaciones que mantuvieron en comisaría mientras estuvieron detenidos.
Los tres acusados secuestraron y asesinaron de un disparo en la cabeza a Alberto. Lo hicieron para robarle joyas, móviles y el dinero en metálico que tenía en sus dos viviendas de Zaragoza.
Las llamadas hechas desde los teléfonos sustraídos permitieron a la policía dar con ellos y detenerles pero todavía quedaba por demostrar que ellos asesinaron a Alberto. Por eso, la policía solicitó al juez instalar micrófonos en los calabozos de la comisaría y el juez lo autorizó. Unas escuchas que probaron su participación en el crimen y que sirvieron para condenar a los acusados a más de 30 años de cárcel.
El Supremo avala estas escuchas en una sentencia que sale adelante con tres votos a favor y dos en contra. La mayoría sostiene que el proceso se hizo con todas las garantías porque la colocación de los micrófonos se realizó en presencia del secretario judicial que levantó acta de lo ocurrido.
Además, se quedaron fuera de las escuchas el recinto en el que los sospechosos se reunían con sus abogados. "Si se permite al director de un centro penitenciario grabar las conversaciones de los detenidos, mucho más a un juez de instrucción cuando su labor sea garantizar una pluralidad de valores en una sociedad democrática que no pueden desconocerse", dicen los magistrados.
Dos magistrados, en contra
No lo ve igual José Manuel Maza que en su voto particular califica de "trampa" la actuación de la policía para poder incriminar a los detenidos. De su misma opinión es el otro magistrado que discrepa de la sentencia. Perfecto Andrés Ibáñez asegura que "no cabe mayor insidia que la de convertir en declaración inculpatoria la conversación de quien se considera a salvo de escuchas y que, privado de libertad, da por descontado que goza del resto de sus derechos fundamentales".

Pedro Jiménez
Redactor Jefe en la Cadena SER. Antes he pasado por los equipos de Hora 14, Radio Madrid, Fin de Semana,...




