Basagoiti dice que no ha recibido al embajador venezolano porque no tiene "detector de metales"

El presidente del PP en el País Vasco, Antonio Basagoiti, ha aclarado este martes que no se ha reunido con el embajador de Venezuela en España, Isaías Rodríguez, como sí han hecho responsables de otros partidos políticos en Euskadi, porque en su despacho, "en la sede el PP en Bilbao", no dispone de "detector de metales".

En declaraciones a los periodistas, Basagoiti, que ha respaldado este martes en Córdoba al presidente provincial del PP en dicha provincia y candidato a la Alcaldía de la capital cordobesa, José Antonio Nieto, ha argumentado que, dado que no cuenta con el mencionado dispositivo de seguridad preventiva, no podía recibir a Rodríguez, dado que no sabía "con qué vendría este hombre, ya que en Venezuela están apoyando a terroristas y a batasunos terroristas".

También se ha referido Basagoiti al hecho de que la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado al juez Eloy Velasco, que investiga las supuesta colaboración entre ETA, las FARC y el Gobierno de Venezuela, que inste al Gobierno de la Nación a pedir la extradición del etarra Arturo Cubillas Fontán, a fin de juzgarle de los "graves actos criminales" y de terrorismo de los que se le acusa en España, habiendo anunciado el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que el Ejecutivo tramitará la petición de extradición al día siguiente de que se la formule el juez.

Ante esto, el líder del PP en el País Vasco ha afirmado que le parece "muy bien", pues, según ha recordado, se ha conseguido en los últimos años "que haya una colaboración internacional contra el terrorismo", especialmente en Francia, lo que ha llevado a los etarras a buscarse "otro refugio, que es Venezuela, y ahora hay que trabajarse lo de Venezuela". Por eso, aunque a él le habría gustado "que la reacción del Gobierno hubiese sido antes, pero bienvenida sea, aunque sea tarde".

De este modo, según ha concluido, "lo que hace falta es que -los terroristas de ETA- no tengan ningún lugar en el mundo donde cobijarse y que acabemos con ellos, de una vez por todas, y que la política sea la de que no hay ninguna esperanza para aquellos que quieran extorsionar a la democracia española".

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