El Atlético despierta en Europa ante el Rosenborg
Los rojiblancos vencen en el Calderón por 3-0 con goles de Godín, Agüero y Diego Costa
Una victoria cómoda frente al Rosenborg noruego, resuelta con goles del uruguayo Diego Godín, del argentino Sergio ''Kun'' Agüero y del brasileño Diego Costa, reactivó al Atlético de Madrid en la Liga Europa, en un duelo sin brillo, pero también sin sufrimiento para el conjunto rojiblanco (3-0).
No falló el equipo madrileño, que conquistó un triunfo imprescindible para sus opciones de clasificación para los dieciseisavos de final del torneo. Ya suma cuatro puntos en el grupo B, en el que ha pasado del último puesto a la lucha por el liderato, con el Bayer Leverkusen como principal obstáculo hacia ese objetivo.
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Hoy, el Atlético tuvo un partido fácil. Por fin entró bien en un encuentro de la Liga Europa de esta temporada, en poco más de un minuto y medio había tenida una ocasión clarísima y había sacado un córner, y prolongó su superioridad todo el duelo, aunque con algún sobresalto, más por relajación local que por calidad visitante.
Pero ni siquiera las ausencias en el once de David de Gea, con una contractura y sustituido en la portería titular por Joel Robles, hoy debutante con nota en Europa, y del argentino ''Kun'' Agüero, de inicio como suplente tras superar una rotura de fibras en el glúteo, minimizaron las enormes diferencias entre uno y otro equipo.
No hubo dudas de que el Atlético es mucho más potente, tiene mucho más talento y posee muchas más cualidades que el Rosenborg, que sólo ofreció síntomas de reacción cuando el equipo rojiblanco bajó la intensidad, ya con 1-0 a su favor. Hasta ese momento, no pareció rival, ni en defensa, ni en ataque para los madrileños.
Porque el Atlético casi siempre se sintió muy superior en el juego y en las ocasiones. También en el marcador, desde el minuto 18, cuando un centro aéreo perfecto de José Antonio Reyes lo convirtió en gol el uruguayo Diego Godín con un cabezazo imparable para el portero Daniel Orlund, el mejor de su equipo en el Calderón (1-0).
Fue mérito del guardameta, con un puñado de buenas paradas, que el conjunto rojiblanco no terminara antes con el partido, porque tuvo oportunidades suficientes para haber firmado algún gol más en el primer tiempo, cerrado, eso sí, con susto, en un disparo de Moldskred salvado, primero, por Joel y, después, por el poste.
Un serio aviso para el Atlético, que se ''durmió'' superada la primera media hora, se desconectó del encuentro y dio alas a un Rosenborg más flojo de lo esperado. Mal síntoma para el comienzo de la segunda mitad, sobre todo porque el choque siguió por el mismo camino, sólo alterado por un remate del uruguayo Diego Forlán.
No sufría en defensa el equipo madrileño, aunque desplegaba un fútbol espeso, sin la velocidad ni la precisión necesaria para generar nuevas ocasiones y, aún más importante, para sentenciar un partido que había comenzado muy plácido, pero que ya apuntaba a inquietudes de última hora por la mínima ventaja en el marcador.
Ya había algunos pitos en el Vicente Calderón, más centros al área del Rosenborg que en todo el primer tiempo y una preocupante ausencia de oportunidades del Atlético, cuando entró al campo Agüero, que sólo necesitó un minuto, su primer contacto con la pelota, para resolver definitivamente el duelo con el 2-0 (m. 66).
Un pase de Reyes al desmarque del Kun dentro del área, un rechace en un defensa y un disparo raso del ''10'' rojiblanco acabaron de inmediato con cualquier duda sobre el triunfo del Atlético, que firmó el 3-0 en una jugada preciosa entre Agüero, con una asistencia por encima de la zaga, y Diego Costa y culminada por el brasileño.