Mazgani y las canciones para la distancia
Mazgani se asentó en Setúbal. Estudió leyes en Lisboa, pero practicó la fotografía para ganarse la vida, también el dibujo. “Nunca he trabajado de abogado, realicé muchas profesiones hasta que comencé en la música”. No fue un flechazo instantáneo, en realidad llegó tarde a este mundillo, pasado los treinta. Finalmente probó sus composiciones con unos amigos y estos le dieron el empujón final.
En 2007 veía la luz su primer trabajo, “Song of the New Heart”. El disco fue votado entre los mejores del año por las publicaciones especializadas. Mazgani se presentaba en sociedad con un disco sobrio y sentido donde su voz reina con poderío, forzando las comparaciones con gente de la talla de Leonard Cohen o Tom Waits. Con Waits habría un encuentro posterior. En 2009 el cantante iraní quedó tercero en el European Songwritting Compettion, el juez era Waits. “Fue una pequeña venganza para mí, he pasado mucho tiempo escuchando su música y ahora él ha tenido que escuchar la mía”, apunta Mazgani. El concurso fue un impulso que le llevó a presentarse en Francia y Holanda, a tocar en festivales y a editar su primer EP a nivel internacional.
Este 2010 ha publicado “Song of Distance”. “La crítica me ha tratado muy bien y ha sido un alivio porque he puesto mucha ilusión en este trabajo”, comenta tomando un café en una cafetería del centro de Madrid. El álbum tiene un halo especial, la voz de este músico sale de sus entrañas, se convierte en un lamento oscuro que recorre el espinazo y explota como un torrente que roza el anhelo, la desesperación, pero sin tristeza. La formación que acompaña a Mazgani, generalmente bajo, guitarra y contrabajo, aportan el matiz que rescata su voz de la más profunda melancolía. Canciones como “Song of distance” o “Dust in the sun” son joyas por descubrir, composiciones capaces de alegrarte un día. Ahora Mazgani se presenta en Madrid con una esperada actuación en el Moby Dick el lunes 20 de diciembre Myspace: Mazgani




