Sociedad
Análisis:

Liberad a Zapatero

La opinión de Antón Losada

En el país donde quien no se escandaliza por algo no es alguien y quien no le zurra a Zapatero resulta sospechoso, va a resultar que el único que no puede hacer chistes con su propia sucesión es el sucedido. Frívolo le han llamado. De ahí para arriba. Todo por darse un desahogo y entretenerse un rato viendo correr la liebre por tantos informativos plurales, tertulias equilibradas, debates sosegados y sesudas columnas que pululan en el excitante panorama mediático español; especialmente en ese inframundo que conforma la TDT.

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El presidente más acosado de nuestra democracia, a quien se atacó por tierra, mar y aire desde el minuto uno de su mandato, también tienen derecho a reírse de vez en cuando. Dice el PP que es una maniobra de distracción. Será para quién se distrae con una mosca. Estuvo mejor el PNV, aclarando que no será el candidato nacionalista. Un poco más de humor y fair play algo menos de transcendencia y teatrillo, no le vendría nada mal al peripatético ruedo ibérico.

Liberemos a Zapatero antes de que alguien publique de ZP que es como el prisionero de Zenda y deambula por los sótanos de Moncloa con una máscara de hierro tapándole la cara, mientras Rubalcaba maneja a su antojo un doble.

Antes de que se comente en las tertulias que sería más humano ocultarle bajo una máscara de aluminio inoxidable. Antes de que alguien creíble, como el Papa o Belén Esteban, tenga que salir a desmentirlo todo.

Porque aquí ya no se sabe aguantar una broma, pero si en Moncloa no se anduvieran con tantos miramientos, lo propio ahora era organizar un concurso vía sms y de paso enjuagar un poco el déficit con el precio de los mensajes. Envía 1 si crees que se lo dijo a Rubalcaba. Envía 2 si crees que fue a Blanco. Envía 3 si piensas que se lo dijo a Pérez, que estuvo en Mallorca. Feliz navidad.

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