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Los Kings hacen pagar a los Lakers su desidia en defensa

Los Kings rompen así una racha de ocho derrotas seguidas frente a los Lakers

Bryant se resigna durante el partido(Reuters)

Bryant se resigna durante el partido

Los Sacramento Kings, el tercer peor equipo de la Liga, sorprendió a Los Ángeles Lakers a domicilio (95-100) y les hizo pagar su desidia en defensa, en un partido que los visitantes llegaron a dominar por 20 puntos durante el tercer cuarto

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DeMarcus Cousins fue el mejor del duelo con 27 puntos y 10 rebotes, mientras que Kobe Bryant se fue hasta los 38 puntos y siete asistencias en un esfuerzo estéril. Pau Gasol, muy gris, añadió nueve puntos y 11 rebotes. La única buena noticia para los Lakers fue el récord de Bryant, que se convirtió en el octavo máximo anotador de la historia de la NBA al superar a Hakeem Olajuwon (26.946 puntos). Por delante de Bryant se encuentran únicamente Elvin Hayes, Moses Malone, Shaquille O''Neal, Wilt Chamberlain, Michael Jordan, Karl Malone y Kareem Abdul-Jabbar.

Nueve minutos tardó Bryant en anotar 13 puntos, los que necesitaba para sobrepasar a Olajuwon en la lista. Los Lakers arrancaron el duelo volcando el ataque en su gran estrella, que terminó el primer periodo con 21 tantos (8 de 11 en tiros) en su haber. Enfrente, Cousins y Omri Casspi le hacían frente con 22 puntos entre ambos, y recibían ayuda con la entrada desde el banquillo de los agresivos Carl Landry y Samuel Dalembert, capaces de neutralizar el buen trabajo de Andrew Bynum y Gasol.

La lucha entre los reservas de ambos equipos resultó de lo más igualada, con una destacada aportación de Shannon Brown y Landry, mientras Cousins ponía velocidad de crucero y resultaba imparable para la inexistente defensa de los de Phil Jackson, que llegaron al descanso por debajo en el marcador (55-59) y permitiendo a su rival anotar el 59 por ciento de sus tiros. Sin embargo, cuando el Staples Center esperaba una reacción desde la defensa, los californianos, mostrando una preocupante indolencia, llegaron a perder por 20 (61-81) al ecuador del tercer cuarto, debido al gran juego de Tyreke Evans y a la explosión de Dalembert con sus lanzamientos a cinco metros.

Tal vez con la mente puesta en el duelo del domingo ante los Celtics, los locales, que rozaron el ridículo en varios momentos, tardaron en dedicar al partido el esfuerzo que requería. Lamar Odom comenzó a tomar protagonismo en ataque y el equipo volvió a meter balones interiores a Bynum, con lo que la renta se redujo a 14 a falta de un cuarto (71-85).

Con Bryant jugando desde el comienzo del periodo -algo inusual-, los Lakers, mucho más intensos pero muy dependientes de su máximo anotador, siguieron limando la distancia tras un mate de Gasol (89-93, m.45) al recibir un pase sin mirar de Odom, digno de "Magic" Johnson. Pero en los momentos decisivos los californianos se mostraron muy erráticos en el tiro a pesar de obtener lanzamientos claros y sin oposición, y Sacramento, que se aferró al partido con uñas y dientes, se llevó la victoria gracias al buen hacer en los compases finales de Evans y Casspi.

 
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