Mato cree "inviable" que las subvenciones al cine español superen la recaudación en taquilla
Pide en su blog "repensar el modelo" y apuesta por la iniciativa privada
La vicesecretaria de Organización del PP, Ana Mato, considera que la edición de los Goya ha reflejado "la brecha" que existe entre quienes hacen cine y los que van a verlo y, por eso, ve necesario "repensar el modelo" del sector cinematográfico español. Tras calificar de "inviable" económicamente que las subvenciones públicas sean superiores a la recaudación en taquilla, en un post de su blog apuesta por ir "más en la línea de fomentar la inversión privada mediante deducciones fiscales"
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Mato confiesa que le ha alegrado "mucho" que una película catalana "Pa Negre", rodada en catalán, haya sido la gran triunfadora de la gala de los Goya. Eso sí, admite que no ha dejado de "sorprender" que una cinta "casi desconocida" y que, "al menos hasta el domingo no se proyectaba en parte de España, haya sido la gran triunfadora". Según añade, datos de 2010 reflejan una caída superior al 30 por ciento en la recaudación, la pérdida de cerca de 7 millones de espectadores, la ausencia de largometrajes nacionales entre las diez películas más vistas en nuestras pantallas y "una exigua" cuota del 11 por ciento.
¿Por qué la gente no va al cine?
A su entender, estos datos "debieran ser motivo de reflexión" para el sector del cine español. "Se podrá hablar de piratería, de crisis económica y otra serie de factores nada desdeñables y que sin duda han influido, pero si el público que ve cine español se ha reducido, también hay otros motivos", advierte. La responsable de Organización del PP subraya que en España hay cine de "muy alta calidad", con directores y actores de "fama internacional". En su opinión, "rara es la ocasión en la que cuando se junta tanto talento y se hace una buena película la gente no responde o no va al cine" y pone como ejemplo el éxito de "El secreto de sus ojos", "Celda 211", "Ágora", "Tres metros sobre el cielo", "Los ojos de Julia" o "Que se mueran los feos" e incluso en el apartado de animación "Planet 51".
Mato sostiene que, según los últimos datos aparecidos, en 2010 las subvenciones (más de 89 millones) han vuelto a ser mayores que la recaudación en taquilla (69,7), un hecho que califica de "económicamente inviable y nada positivo para la salud y el éxito" del cine español. En este punto, destaca que algunas de las películas que ella misma ha citado "no están directamente relacionados con subvenciones públicas, sino con apuestas de productoras privadas y casualmente tratan temas y cuestiones que logran el aplauso del público". Aunque dice que cree en el cine comprometido y que "debe de protegerse de alguna manera", apuesta por ir "más en la línea de fomentar la inversión privada mediante deducciones fiscales que en la ayuda directa con independencia de que la película acabe finalmente en un cajón del Ministerio de Cultura".
Por eso, insiste en que es "importante" esa "reflexión colectiva entre productores, directores, actores y todo aquél relaciona con el sector del cine en España, junto con los poderes públicos". "Y abrir este debate o repensar el modelo de nuestro sector cinematográfico no es ir contra el cine español", enfatiza, para añadir que todo el mundo quiere que el cine español "tenga éxito" y que hay que "encontrar la manera de lograrlo".