La Fiscalía pide una fianza civil de 1,6 millones de euros a Unió Mallorquina
Su ex presidente asegura que no hay relación con la nueva "Convergència per les Illes Balears"
Los fiscales Pedro Horrach y Miguel Ángel Subirán han solicitado una fianza de responsabilidad civil de 1,6 millones de euros a Unió Mallorquina (UM). La decisión se ha tomado en el marco de una vistilla celebrada dentro de la operación Picnic, en la que han estado presentes como representantes legales del partido su presidente, Josep Meliá, y su secretario general, Joan Monjo.
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A su salida de los Juzgados, donde han sido requeridos por el juez de guardia, Meliá ha eludido dar detalles sobre esta solicitud porque está bajo secreto de sumario, aunque ha dejado claro que es a causa de unos hechos "que afectan a la antigua UM y a sus antiguos responsables". "Nada que ver con la actual formación, con Monjo ni conmigo", ha añadido al respecto.
Nuevo partido: Convergència per les Illes Balears
Unió Mallorquina, además, ha formalizado esta noche su disolución: cambia de sede, de nombre y de ejecutiva, después de que varios miembros del partido se hayan visto implicados en distintos escándalos relacionados con la corrupción. El objetivo es, en palabras de su presidente Josep Meliá, "romper clara y profundamente con el pasado".
El nuevo partido tendrá una junta gestora que presidirá Melià hasta la celebración de un congreso tras los comicios de mayo.
El partido se ha visto "abocado" a tomar esta iniciativa y "cambiar", ha dicho Melià, que ha añadido que esta transformación también se debe a que existe una "judicialización" de la política y una "mediatización" de las elecciones.
De este modo se pone fin a un partido que cuenta con casi 30 años de existencia, que ha presidido casi en la totalidad de ese tiempo María Antonia Munar y que ha sido protagonista de la vida política balear al ser "bisagra" y pactar durante años con el PSOE o el PP para gobernar las instituciones baleares.
"Convergència per les Illes Balears" se presentará a las elecciones autonómicas y municipales de mayo y tiene como objetivo tener el peso político que tienen CiU o Coalición Canaria (CC), y defenderá la ideas políticas de centro, liberales y nacionalistas, es decir, que "continuarán siendo las mismas porque las ideas están por encima de las siglas", ha dicho Melià.
"No hay derecho a que se vincule a casos de corrupción a gente que no tiene nada ver y que no tienen por qué llevar esta cruz", ha manifestado Melià, que ha reiterado de manera tajante su rechazo al "clientelismo político y prácticas ilegales" que han afectado a "todos" los partidos en algún momento, aunque esto "no justifica nada", ha apostillado.