El FMI mejora sus previsiones para España | 11-04-2011
El Fondo Monetario Internacional espera un crecimiento del 0,8% para 2011 y una tasa de paro del 19,4%
El Fondo Monetario espera que la economía española crezca este año un 0,8%, dos décimas más de lo que preveía en enero, cuando rebajó las perspectivas de nuestro país. Para 2012, el FMI estima que España crecerá un 1,6%, una décima más que en enero. En ambos casos, las proyecciones del Fondo son inferiores a las del Gobierno, a pesar de que el Ejecutivo las revisó a la baja de la semana pasada.
El departamento que dirige Elena Salgado hizo pública la semana pasada su revisión del cuadro macroeconómico, en el que se prevé un crecimiento del 1,3% en 2011 (esta cifra no se revisó) y del 2,3% para 2012 (dos décimas menos que su última previsión).
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Sin embargo, el organismo que dirige Dominique Strauss-Kahn es más optimista que el Gobierno en cuanto al paro. Espera que la tasa de desempleo se coloque en el 19,4% este año, cuatro décimas menos que la previsión oficial; y estima que será del 18,2% en 2012, también tres décimas menos de lo que espera el Gobierno. En lo que se refiere a la inflación, el Fondo ve una media del 2,6% este año y un 1,5% el que viene. Para la zona euro, el FMI espera un crecimiento del 1,6% este año y del 1,8% en 2012, aunque ve un comportamiento desigual. El estancamiento es mayor en los países periféricos del euro que en el resto de miembros de la moneda única.
El FMI reconoce las medidas que ha tomado España para recortar el gasto público, pero cree que se debe ir más allá. En cuanto al sector financiero, el Fondo alaba la política de transparencia adoptada con las entidades en nuestro país, a las que se ha obligado a publicar sus datos y a afrontar sus necesidades de capital.
El informe sobre las proyecciones económicas incluye un apartado específico sobre los países periféricos, entre los que se encuentra España. Aunque el Fondo distingue claramente entre nuestro país y Grecia, Irlanda y Portugal, recomienda una serie de recetas, de sobra conocidas, e iguales para todos ellos: eliminar la vinculación de salarios e inflación, abaratar el despido, moderación salarial, aumentar la productividad, reducir el gasto público o subir impuestos a corto plazo, y bajarlos a medio plazo para fomentar la inversión privada.
