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Las feligresas de la Sagrada Familia retuvieron al detenido hasta que llegó la Policía
Las feligresas de la parroquia de la Sagrada Familia junto con unos turistas retuvieron ayer al presunto autor del incendio en la cripta de la basílica y lo custodiaron hasta que llegó la policía. Hoy algunas de ellas explicaban que lo pillaron in fraganti saliendo de la sala. Al parecer, habría rociado algunos objetos con un spray y, en los bolsillos, llevaba varios mecheros. Pero se desconoce todavía si prendió fuego adrede o involuntariamente al intentar alumbrarse. El párroco ha tenido que trasladar hasta uno de sus despachos la misa de las 9 puesto que la sacristía ha quedado totalmente calcinada y las paredes de la cripta han quedado tiznadas de hollín. De hecho, hace poco acabaron las tareas de restauración; unas tareas que tendrán que retomarse de nuevo. Los bomberos consiguieron sacar el humo gracias a ventiladores y extractores. Así, pudieron salvar lo más importante de la sala, las vidrieras originales de Gaudí. La sala permanecerá cerrada al público por lo menos hasta después de semana santa. Aseguran que será entonces cuando empiecen a abordar cómo se mejorará el dispositivo de seguridad de la basílica.
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