Zapatero y el Papa analizan la situación económica internacional

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha conversado esta tarde durante media hora con Benedicto XVI sobre las relaciones bilaterales entre España y la Santa Sede y la situación económica internacional, ha informado el Ejecutivo tras la reunión.

El encuentro, celebrado en la sede de la Nunciatura en Madrid, ha comenzado a las 17:30 horas cuando el presidente del Gobierno ha llegado acompañado por el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui. Zapatero y Benedicto XVI han constatado que las relaciones son intensas desde el punto de vista institucional y han reiterado la vigencia de los acuerdos entre España y la Santa Sede. Han abordado, asimismo, la situación económica en Europa, y el presidente español ha mostrado el compromiso firme de España de aplicar con eficacia las medidas de ajuste adoptadas, así como de trabajar por una mayor gobernanza económica europea y reforzar la coordinación internacional.

Las mismas fuentes han informado de que ambos se han referido a la dramática situación humanitaria en el Cuerno de África, en particular a la terrible situación de malnutrición infantil. En este sentido han realizado un llamamiento a la comunidad internacional para que haga llegar cuanto antes la ayuda necesaria, así como a las autoridades responsables para que faciliten la distribución de dicha ayuda.

También han tratado las revueltas en el mundo árabe, y el presidente del Gobierno le ha transmitido al pontífice su convencimiento de que una sociedad árabe democrática es la mejor garantía para la libertad religiosa. En cuanto a Oriente Medio, Zapatero y Benedicto XVI han coincidido en que la comunidad internacional debe redoblar sus esfuerzos ante la actual situación, ya que la única salida posible es la negociada diplomáticamente.

Durante la reunión, se ha hablado de otros asuntos de actualidad, como los recientes sucesos ocurridos en Noruega, y han coincidido en su preocupación por el ascenso de una ideología xenófoba que atenta contra los valores de libertad religiosa y convivencia característicos de la sociedad europea. El encuentro es el cuarto entre ambos, el último de ellos en noviembre de 2010, durante la visita del Papa a Barcelona, y en junio de ese mismo año, con motivo del viaje del jefe del Ejecutivo a la Santa Sede.