Thomas ahora es Tammy y tiene 11 años. Es hijo adoptivo de dos mujeres que alegan que el cambio de sexo del niño es mucho mejor ahora que esperar a que sea adulto. El caso conmociona a Estados Unidos. Thomas Lobel, tiene un trastorno de identidad sexual y se encuentra en proceso de tratamiento de hormonas desde hace años en Berkely (California) para dejar de pasar por la pubertad como un niño. El hijo adoptivo de Debra Lobel y Pauline Moreno había manifestado desde hace años su intención de cambiar de sexo y sus madres lesbianas lo acompañaron en su empeño, según muestra un vídeo de la CNN, a pesar de las criticas de sus amigos y familiares. Las mujeres adoptaron a Thomas con dos años y, aunque sus madres siempre quisieron que fuera una niña, aseguran que nunca lo presionaron para que se convirtiera en mujer. Según las madres, una de las primeras cosas que dijo Thomas fue:«soy una niña» y lo hizo en el lenguaje de signos porque sufre un defecto en el habla. Siete años después, el niño intentó mutilarse sus genitales, y los psiquiatras le diagnosticaron un trastorno de identidad sexual.