El Banco de España detecta que la economía acentuó su deterioro en el cuarto trimestre
En su último boletín mensual asegura que la culpa es de la crisis de deuda de la zona euro y de las malas previsiones económicas mundiales
No hay tregua para la economía española. Después de registrar un estancamiento en el tercer trimestre y de que los principales organismos internacionales hayan alertado en las últimas semanas de la posible entrada de España en recesión a finales de este año, hoy el Banco de España aporta datos que parecen indicar que esos malos augurios tienen muchas probabilidades de cumplirse. Alerta en su boletín de noviembre de que la debilidad de la demanda y de la actividad se ha acentuado en los primeros meses del cuarto trimestre.
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Aunque matiza que los datos son provisionales, el Banco de España adelanta que las tendencias del tercer trimestre, cuando la economía se estancó, se han acelerado al comienzo del cuarto trimestre. Dice el regulador en su último boletín mensual que "se ha acentuado la debilidad de la demanda y de la actividad, influida por el recrudecimiento de las tensiones financieras" por la crisis de deuda de la eurozona y "por el empeoramiento de las perspectivas de crecimiento a nivel mundial".
Recuerda que de nuevo retrocedió la producción manufacturera, que la construcción continúa su ajuste y que la actividad industrial sigue débil. Como punto positivo, destaca el tirón del turismo, que se mantiene. En lo que se refiere a la evolución financiera, el Banco de España detecta que sigue la moderada contracción de la financiación captada por empresas y familias, y un aumento, aunque menor, de la deuda de las administraciones públicas.