Messi e Iniesta traen de vuelta al mejor Barça en la victoria frente al Valencia

Empezar un partido de Liga en casa frente al Valencia, con el máximo rival 13 puntos por delante y con el misterio de si el entrenador y gran faro del equipo renovará, quizás haya sido el peor punto de partida del Barça en la era Guardiola. Montoya en el lateral y las vueltas de Pedrito y el castigado Piqué eran las novedades de Pep. Emery por su parte salía con lo mejor que tenía tras la sorpresiva baja de Banega

El Barcelona salió con fuerza, impulsado por la inercia ganadora de Leverkusen, pero en el ambiente se respiraba ansiedad, inseguridad y miedos. Y cuando esto ocurre lo normal es fallar. Así pasó cuando en la primera que tuvo el Valencia, Piatti se aprovechó de las dudas de Valdés y remató un centro de pícaro que efectuó desde la banda Feghouli. 0-1, y esta quizás sí haya sido el peor escenario en Liga que haya vivido Guardiola en su carrera como entrador.

Pep pedía a lo largo de la semana razones o motivos para seguir adelante en esta fabulosa labor que hace con el Barça. El momento era de máxima exigencia y los jugadores tenían en su mano darle al técnico una respuesta a sus indecisiones. El Valencia siguió por el buen camino, pero solo consiguió desdibujar al Barça durante cinco minutos más, el lapso que tardaron Iniesta y Messi en devolver al fútbol la mejor versión del Barça.

Montoya empezó a entrar por la banda, Alexis a moverse entre líneas y Cesc a llegar desde la segunda línea. Todo esto promovido por Iniesta y Messi, que juguetearon durante toda la primera mitad con Víctor Ruiz y Rami como si fueran soldaditos de plomo. Posiblemente los últimos 25 minutos de la primera mitad hayan sido los mejores del Barça en lo que va 2012. Un muestrario que llegó a su catarsis con el gol de Messi y con un balón picado de Iniesta que Cesc reventó contra la cruceta de la portería de Alves.

Con el segundo gol del Barcelona el Camp Nou respiró con alivio y empezó a disfrutar como lo venía haciendo hasta que el Madrid de Mourinho le quitó la hegemonía en el campeonato doméstico. El Valencia, apocado y desafortunado como en pocos días, veía como además de Banega, Miguel caía lesionado y Ricardo Costa le sucedía en el terreno de juego. La primera mitad acabó con la certificación de la buena actuación de Diego Alves, que hizo que su equipo llegará vivo a la segunda mitad.

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Dominio claro azulgrana intercalado con sustos del Valencia

Otra vez a diez puntos del Madrid, el Barça salió al segundo parcial audaz y buscando cerrar el partido. Pero otro de los debes del equipo catalán este año reside en la falta de acierto. El gol no llegaba, y Diego Alves apartaba de su portería cualquier cosa que se dirigiera a ella. Iniesta lanzó una rosca imposible que se fue lamiendo el poste, mientras tanto Cesc seguía topándose con el felino portero brasileño.

El Barça lo hacía casi todo en el partido, y el Valencia apenas trenzaba dos pases seguidos guiado por un centro del campo bastante poco imaginativo. Pero del equipo de Emery emergen jugadores casi siempre inesperados y que sostienen las posibilidades de su equipo. Ese es Feghouli, el franco-argelino con cara de travieso lanzó una volea a puerta que Valdés despejó de forma milagrosa.

Messi cada vez se sentía más a gusto, pero aún debería esperar para hacer el tercero. Debía esperar a Tello. De una de sus jugadas nació el rechace que permitió a Leo completar su triplete. El Valencia pereció ante el gol y el partido empezó a adolecer de intensidad, todos menos Messi, que en esa tesitura es aún mejor. En otro desmarque, se plantó ante Alves y le batió por arriba. Xavi, recién entrado en el terreno de juego, reía incrédulo ante la exhibición de su compañero. Obviamente sin saber que él haría el quinto minutos más tarde.

Así acabó el partido ante el desquicio del Valencia, que no encuentra la forma de meterle mano al Barça. Con las posibles lecturas de que el mejor Barcelona por fin ha vuelto y lo ha hecho de la mano de la mejoría de Messi e Iniesta. La segunda va en referencia a la renovación de Guardiola, parece que sus jugadores han captado la indirecta y le están dando motivos para renovar.