Black Lips, salvajes y gamberros
La banda de Atlanta, que devolvió el ruido garajero a la primera plana de los festivales de medio mundo, regresa este verano a España para presentar Arabian Mountain. Para este último disco la banda acudió a Mark Ronson, uno de los más prestigiosos productores del momento en busca de un giro en su sonido. “Cuando nos pusimos a buscar un productor mencionamos su nombre y dio la casualidad de que quiso hacerlo, además ha resultado tener un gran gusto en sonidos vintaje, es más que un productor de rock n roll. Queríamos probar algo nuevo en este disco y ha salido todo muy bien, ha sido genial trabajar con él, hemos estado en la misma onda”, explica Jared Swilley, bajista y vocalista de la banda. “Siempre me resulta complicado evaluar mis propias cosas, pero me he sentido muy bien haciendo este disco, lo hemos pasado genial haciéndolo”.
Tras siete discos Black Lips han querido dar un nuevo paso en este álbum y se decidieron por recibir una ayuda externa, algo nuevo en una banda acostumbrada a trabajar siempre entre ellos. “Hemos grabado siete discos hasta este siendo solamente cuatro personas y ha estado muy bien tener a alguien con nuevas ideas, llevamos 12 años trabajando juntos y parecía necesario dar una vuelta de tuerca a nuestro sonido”. El resultado ha convencido a la crítica por conseguir limpiar el sonido sin perder contundencia. “Creo que la gente lo disfrutará, es la cosa que más me ha gustado de las que he hecho en bastante tiempo”, señala el músico.
Sobre las tablas la banda sigue siendo el mismo grupo de salvajes descerebrados que llamó la atención de público y prensa hace ya una década. Sus directos mantienen la esencia de la diversión. “Creo que para que la gente se lo pase bien los primeros que tenemos que disfrutar somos nosotros”. Su música sigue basándose en pildorazos contundentes, el potentes golpes de rock y punk, sin pausa, sin freno, manteniendo vivo aquello de lo bueno si es breve dos veces bueno. “La verdad es que a la banda le cuesta mantener la atención durante más tiempo… me gustan las canciones cortas de pop, pierdo el interés rápido. Además está la presentación en directo, nos gusta que nuestras canciones sean como descargas de energía”, explica Swilley. Pero la banda tiene merecida su fama de gamberros y provocadores. Además de orinarse, besarse entre ellos, vomitar borrachos sobre el escenario o tocar desnudos, el grupo ha tenido algún que otro susto por sus desvaríos como les sucedió en 2009 en India, donde tuvieron que escapar a escondidas del país después de que los promotores de su concierto les denunciasen ante la policía por mala conducta. En 2011 la banda tenía planeada una gira por Iraq, Siria y Turquía. Finalmente fue cancelada, quizá hubiese demasiado riesgo en aquel viaje, tal vez la idea de pasar una temporada en la cárcel de unos de eso países resultase poco alentadora, puede que estén madurando.
La banda estadounidense actuará este verano en España con dos actuaciones en Barcelona dentro del Primavera Sound y una en Madrid confirmada para el 5 de junio en el Teatro Lara, concierto organizado por SON Estrella Galicia.
