Ciberseguridad en España. Cada vez más ataques

El delito informático es el más cobarde de todos: los autores materiales de estos delitos tiran fuerte la piedra pero desde el anonimato. Y es muy rentable: se sacan muchos beneficios económicos robando y vendiendo después la información. Dicen los expertos que el mayor riesgo es siempre el ser humano y el mejor antivirus el sentido común. Los delincuentes informáticos tienen muchas dianas y entre éstas las empresas. Es fácil atacar una empresa, basta con enviar un correo al jefe de seguridad que hable de rebajas de sueldo. Lo va a abrir seguro y a partir de ese momento está perdido. Le colocan un software malicioso y acceden a la información confidencial. El ejemplo es de Cesar Lorenzana, jefe de delitos telemáticos de la UCO (la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil). "El delincuente que planifica el robo de información de una empresa, dice Lorenzana, no se plantea atacar a la entidad como tal. Accede a la empresa a través de empleados o directivos que ofrecen fácilmente sus datos a la red".

Cambiamos de escenario. El atacante trabaja en la propia empresa. No vale con sospechas. Hay que probar que tu empleado está expidiendo pornografía infantil desde ordenadores de la empresa para que la policía pueda conseguir una orden de registro judicial. Así lo ve el Juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, que reconoce abiertamente las carencias que tiene nuestra legislación penal en la regulación de delitos telemáticos con un ejemplo que aunque puede llegar a ser simpático da una idea de cómo funciona la ley. "Esto es un señor que quería divorciarse de su señora, le monitorizó el ordenador de casa, la señora cada vez que el marido se iba a trabajar empezaba a chatear al querido y cuando llevó esas pruebas al juez de familia para que viera lo mala que era ella porque le ponía los cuernos le condenaron por un delito de descubrimiento y de revelación de secretos". Se divorció pero después de entrar en la cárcel para cumplir un delito.

Las ciberamenazas son ataques que se practican desde casa y con zapatillas. Y quienes persiguen estos delitos son "policías sin pistolas". El asunto se ha tratado esta semana en una jornada que ha organizado la asociación Pro Guardia Civil (APROGC). Con el título "La Guardia Civil y la protección de las empresas frente a las ciberamenazas" expertos de la benemérita, jueces como el juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, empresarios y expertos informáticos han debatido sobre la necesidad de coordinar y avanzar en este tipo de delitos que cada día sacuden más a la geografía española.

Delitos informáticos cometidos en empresas extrajeras con infraestructuras españolas

¿Y qué pasa cuando el delito telemático se intercepta en empresas extranjeras que utilizan infraestructuras españolas? Contesta otra vez el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco. "El dato que nos hace daño como no está residenciado en un servidor español no nos lo puede ceder una empresa española y cuando se lo pedimos a la empresa extranjera nos da excusas porque no le interesa". El juez Velasco lo tiene claro: "las telecomunicaciones jurídicamente hablando son una concesión administrativa de cada país y en nuestro caso de España, como las playas. Cada gobierno, señala el juez, deja a determinadas empresas explotar algo que no pertenece a esa empresa sino a España y por lo tanto como contrapartida a que estas empresas estas consiguiendo beneficios en España, tenemos que obligarles a que colaboren a que nos den el dato para avanzar en la investigación". El problema apuntan fuentes judiciales y el mismo juez Velasco es que no colaboran y por tanto en más de una investigación los jueces se ven obligados por el principio de la defensa nacional y con autorización judicial a conseguir el dato en el extranjero sin necesidad de pedirlo en comisión rogatoria.

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Actualmente tampoco colaboran países como EEUU en casos de terrorismo. Con Francia las relaciones han cambiado pero durante años y con el terrorismo de ETA el puñal que hacía daño en el País Vasco y en el resto de España tenía el filo en España y el mango en Francia. Y como nosotros no teníamos soberanía en Francia no nos podíamos defender. EEUU a día de hoy siguen sin colaborar todo lo que le gustaría a España incluso en estos casos de terrorismo. El juez Velasco ponía otro ejemplo. "La Organización terrorista GRAPO utilizó una página web para hacer lo que hacen los terroristas: propaganda. Esta página web dice el juez estaba residenciada en un servidor de EEUU. Hace cuatro años se le mandó a EEUU una comisión rogatoria para que informase de los datos que llevaron a la introducción de esa página web, quienes fueron los que la contrataron etc. Cuatro años después concluye Eloy Velasco EEUU no ha contestado todavía".