Queman a un hombre por blasfemar el Corán
El hombre había sido acusado de blasfemia y detenido por la policía
Una turba de gente ha prendido fuego y causado la muerte a un hombre acusado de blasfemia por quemar un ejemplar del Corán en la ciudad de Bahawalpur, en la provincia de Punjab, este de Pakistán. Un agente de la policía pakistaní ha dicho que la víctima tenía problemas mentales.
La Policía ha detenido al hombre después de que sus vecinos le acusaran de profanar el Corán, pero antes de que comenzara la investigación, miles de personas han irrumpido en la comisaría.
"Nos han pedido que le matemos delante de ellos, advirtiéndonos de que, en caso contrario, se lo llevarían y lo matarían ellos mismos", ha explicado el inspector policial, Ghulam Mohiuddin.
Más información
- El accidente nuclear de Fukushima podía haberse prevenido, según los expertos
- Detenidos 29 miembros de una secta caníbal que se comió a siete personas en Papúa
- Siete soldados y un policía muertos en un ataque en el norte de Pakistán
- Detienen a un imán por falsear pruebas contra una niña cristiana acusada de blasfema
Los agentes han disparado gases lacrimógenos para dispersar a la multitud, pero sin éxito. "Estábamos totalmente sobrepasados en número. Eran demasiados para nosotros y estaban histéricos", ha dicho uno de los agentes.
En su intento por llevarse al hombre, los asaltantes han golpeado y herido a algunos policías e incluso han levantado barricadas alrededor de la comisaría para impedir que otros uniformados llegaran como refuerzo.
Finalmente, la muchedumbre ha conseguido capturar al hombre, le ha arrastrado hasta el lugar donde supuestamente quemó el Corán, le ha rociado con gasolina y le ha prendido fuego. Según testigos, cientos de personas han observado la escena.
La Policía todavía no ha conseguido identificar a la víctima, aunque ha aseverado que era un hombre con problemas de salud de mental. "No tenía ni idea de lo que estaba ocurriendo. En la comisaría estaba cantando y riendo", ha dicho un agente.
Pakistán posee una controvertida ley de blasfemia que permite condenar a muerte a aquellos que insulten al Islam, aunque rara vez se ejecuta la pena.