SER Reporteros: "Los sonidos del fuego"

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Un gesto simple y hasta grosero, un gesto que se hace sin pensar. Tirar una colilla por la ventanilla del coche o en el suelo de un aparcamiento. Ahí, dicen los investigadores, está el origen de los dos incendios que han ardido en Girona esta semana. Un diez por ciento del Alt Ampurdá ha quedado calcinado. Cuatro muertos, ocho heridos, miles de desalojados, decenas de viviendas y granjas calcinadas. Es el balance del horror que ha desencadenado un simple gesto.




