El presidente de la UCAM, sorprendido por el robo del talón de 100.000 euros que envió al Vaticano
José Luis Mendoza reconoce haber dado casi 50 millones de euros en 15 años para ayudar a la Iglesia
El presidente de la Universidad Católica San Antonio, de Murcia se ha mostrado "sorprendido" por la noticia del robo por parte del mayordomo del Papa del talón de 100.000 euros que esta institución docente privada entregó al Óbolo de San Pedro para ayudar a pobres y necesitados.
Mendoza ha informado de que entregó el cheque en mano a Benedicto XVI durante la visita que este hizo el pasado marzo a Cuba, país en el que la UCAM imparte distintas enseñanzas desde hace dos años.
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A Mendoza, que conoce personalmente al Papa -incluso desde antes de que lo fuera-, pero no a su mayordomo, Paolo Gabriele, dice constarle "con certeza" que el cheque nominativo fue cobrado en nombre de la Santa Sede, pero ha matizado que el cobro debió producirse tras la recuperación del talón en el registro de la casa de Gabriele. Por ello, ha confiado en que "se ponga más cuidado en el entorno del Santo Padre para que esto no vuelva a ocurrir".
El talón, fechado el pasado 26 de marzo, fue encontrado en la vivienda de Gabriele, quien, junto a un técnico informático del Vaticano, será juzgado por el robo y difusión de documentos secretos de la Santa Sede, según la decisión del juez instructor del Tribunal de Estado Vaticano, Piero Antonio Bonnet.
La petición de enjuiciamiento por parte del promotor de Justicia del Vaticano (fiscal), Nicola Picardi, y el dictamen de Bonnet, documentos que suman 30 páginas, fueron entregados este lunes por el Vaticano a los medios de comunicación.
Además de documentos reservados y del cheque de la UCAM, entre el material retenido "se encontró una pepita de oro y una edición ilustrada de la Eneida de Annibal Caro, de 1581, todos ellos regalos ofrecidos al Santo Padre", refiere el fallo.
A Gabriele, de 46 años, el juez le imputa el delito de robo con agravante, y acusa también al ciudadano italiano y técnico en la Secretaría de Estado Claudio Sciarpelleti, de 48, "de haber favorecido el robo con agravante y de violación de secreto". El proceso penal de tres jueces se celebrará después del 20 de septiembre y la pena que puede recaer, sobre todo a Gabriele, oscila entre 1 y 6 años de prisión.
El escándalo de las filtraciones de documentos reservados de la Santa Sede se desató a principios de año, cuando una televisión italiana sacó a la luz unas cartas enviadas a Benedicto XVI por el nuncio en EEUU, Carlo María Viganó, en las que denunciaba la "corrupción, prevaricación y mala gestión" en la administración vaticana.