Libertad bajo fianza para la niña paquistaní acusada por un imán de blasfemia al Islam
El imán fue detenido por falsificar presuntamente las pruebas contra la menor
Un tribunal de Islamabad ha dictado este viernes la libertad bajo fianza de la niña cristiana paquistaní Rimsha Masih, encarcelada desde hace tres semanas tras ser acusada de quemar textos coránicos, según informaron medios locales.
El abogado de la niña ha declarado a los medios que tanto ella como su familia siguen bajo una seria amenaza de ser atacados por integristas radicales a pesar de la excarcelación bajo fianza, previo pago de medio millón de rupias (algo más de 5.200 dólares).
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La niña cristiana Rimsha Masih fue encarcelada a mediados de agosto por un supuesto delito de blasfemia contra el Islam. Algunos vecinos musulmanes y el imán la acusaron de haber quemado parte del libro Noorani Qaida, un manual infantil de introducción al Islam que contiene versículos del Corán.
El imán, acusado de falsificar pruebas
La libertad para Rimsha se ha producido días después de que la Policía detuviera a Jalid Yadun, el imán que había lanzado la acusación contra la niña, por la presunta falsificación de las pruebas inculpatorias contra la menor. Varios testigos, vecinos de la aldea de la niña, aseguraron que habían visto cómo el clérigo introducía "papeles quemados" del Corán en la mochila de la adolescente.
De momento se desconoce cuándo será excarcelada Rimsha Masih, cuya detención causó la indignación de grupos religiosos y laicos de todo el mundo y cuya vida podría correr peligro si regresase a su barrio.
Los cristianos representan el 4% de la población paquistaní
Las leyes contra la blasfemia de Pakistán castigan duramente, sin descartar la pena de muerte, a quienes hablen mal sobre el Islam o el profeta Mahoma y a quienes profanen o quemen partes del Corán, el libro sagrado musulmán.
Los cristianos representan el 4% de la población paquistaní. Según los miembros de esta comunidad, las condenas por blasfemia suelen basarse únicamente en declaraciones de testigos y normalmente se deben a venganzas personales.