Sujetar firmemente el volante, dejar de acelerar y nunca tocar el freno
Ante la alerta por el riesgo de fuertes lluvias e inundaciones previstas, el RACE nos recuerda las recomendaciones básicas para conducir con climatología adversa o ante la posibilidad de riada.
Qué hacer si vamos conduciendo y nos atrapa el agua: Hay que tener en cuenta que el agua puede impedir que podamos abrir la puerta por la presión. En ese caso, no intente salir. Póngase el cinturón para prevenir posibles impactos por el desplazamiento del vehículo, hágase ver (a través de la ventanilla) y espere a los servicios de emergencias.
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Si el coche se inunda, debe esperar a que se llene totalmente de agua. En ese momento estará igualada la presión del interior y del exterior, momento en el que podrá abrir la puerta o la ventana para salir del vehículo.
Respecto a la conducción
Nunca debemos arriesgar nuestra seguridad cruzando badenes inundados o zonas anegadas, ya que desconocemos la profundidad o los posibles socavones ocultos por el agua, corriendo el riesgo de dejar nuestro vehículo atrapado en la balsa de agua. Es importante recordar que cuando un vehículo se ve anegado, pierde toda la tracción, y puede incluso ser desplazado sin control alguno por parte de los ocupantes.
Aumente la distancia de seguridad con respecto al resto de vehículos, adecue la velocidad a las circunstancias del tráfico, evite adelantar en vías de doble sentido, y preste especial atención a peatones, ciclistas o motoristas, ya que la lluvia intensa reduce la visibilidad, aumenta la distancia de detección y provoca reacciones imprevisibles en el vehículo (pérdida de adherencia, riesgo de perder el control...).
También tenga especial precaución con el riesgo de aquaplanning en balsas de agua que se pueden producir como consecuencia de estas lluvias. En este caso, sujete firmemente el volante, deje de acelerar y nunca toque el freno en estas zonas. En el caso de vernos sorprendidos por la riada, es importante abandonar el vehículo en los primeros estadios, y sobre todo hacernos ver para ser atendidos por las emergencias. Olvídese de sus pertenencias, ya que las trombas de aguas son imprevisibles, rápidas y muy peligrosas. Deje las llaves puestas para que las emergencias puedan retirar su vehículo