El menú perfecto para Navidad
Hay fechas especiales como Nochebuena y Navidad que son para celebrar en torno de una buena mesa. Y para que todo sea perfecto, nada mejor que contar con las mejores y más accesibles sugerencias gastronómicas.
Menús para gourmets, para disfrutar de una buena comida y para quedar bien sin empeñar los ahorros. La Navidad siempre se celebra en torno a una buena mesa, y con la que tenemos encima, este año más que nunca hay que pensar y planificar con antelación qué vamos a comprar para estas cenas y comidas festivas.
Te proponemos tres ideas deliciosas y muy suculentas para que la celebración sea, además de perfecta, muy económica.
Aperitivos y entrantes sofisticados
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Ahumados, foies, sushi, tostas, volavantes, fiambres rellenos... Ideas sencillas y deliciosas en forma de joyas gastronómicas en miniatura para conquistar a cualquier invitado.
Los ahumados son un clásico de muchas cenas navideñas. En taquitos, en rollitos con queso y huevo hilado, en tempura, tartaletas, tostas con queso brie, tartar o con cogollos. No hay delicia que vista más y con más opciones de presentación que el salmón, las huevas o el bacalao ahumado. ¿Y por qué innovar con un poco de sushi? Una nota original y moderna para el menú navideño en forma de makis, sashimi y sushi con la que seguro que aciertas. Y además los puedes comprar ya hechos. Las gulas son otros de los aperitivo clásicos que no faltan en ninguna casa por Navidad. Infalibles y resolutivas las gulas del Norte las puedes preparar salteadas con ajos y un poco de guindilla y perejil, pero no descartes otras opciones menos comunes como en ensalada, revueltas con huevo o en volavanes. Y si queremos ser originales tampoco hay que pasar por alto el surimi tanto en barritas como rallado e incluso preparado en nuevo pintxo donostiarra ya preparado por Krissia.
Otro aperitivo que viste muchísimo cualquier menú navideño son los volovanes y las tartaletas. Ideas gourmet en miniatura con las que podrás dejar volar la imaginación. Rellénalas de surimi, de salmón, de queso con huevas, con ensaladilla de ahumados o en su versión caliente con gulas al ajillo, bacón, huevo, champiñones salteados y todas las opciones que se te ocurran. Lo único que debes tener en cuenta es calentar los volovanes o las tartaletas previamente en el horno.
El foie es otro imprescindible. Un capricho delicioso y apto para todos los bolsillos que conquista por si solo pero también podemos maridar con membrillo, cebolla caramelizada, confituras de frutas. Y una última idea para los entrantes quizás menos conocida son los fiambres rellenos. Un acierto seguro que une carnes de calidad con originales ingredientes que puedes servir templados o fríos junto con una guarnición a base de verduras, frutos secos o frutas en almíbar. Entre ellos: capón asado con medallones de trufa y foie de pato, rotí de pollo trufado con dátiles o pato asado con ciruelas.
Primeros platos
Fresquísimos mariscos no pueden faltar en una cena de Navidad. Desde los langostinos de Madagascar cocidos y acompañados de una salsa mayonesa, a las nécoras cocidas, las cigalas de Huelva a la plancha o las cocidas con una rodajita de limón y cebollino o el txangurro.
También, siguiendo en la línea del marisco, puedes optar por un bogavante gratinado, un primer plato perfecto y fácil hacer para el que sacaremos la carne de los bogavantes que, en una cacerola con mantequilla, pocharemos junto a unas chalotas a las que añadiremos setas, nata líquida y la carne del bogavante junto a mostaza. Una vez listo, rellenamos los caparazones, espolvoreamos queso y gratinamos, y de ahí, a la mesa. Y acompañando, un buen vino blanco.
Otro primero más ligero, y todo un clásico, es la lombarda con frutos secos. Tan solo hay que cocer las hojas de lombarda cortadas en una olla cubiertas por agua, con el zumo de un limón y sal hasta que estén tiernas. Después, en una sartén con un chorro de aceite se saltean unos orejones con pasas y nueces y la lombarda. Se rehoga unos minutos y se sirve mejor junto a un cava rosado.
Segundos platos
Carne o pescado. El eterno dilema que dependerá del gusto de los comensales. Os damos una alternativa clásica e imprescindible para cada paladar.
El besugo horneado y acompañado de patatas y cebollitas es uno de los pescados más comidos en Navidad. ¿Cómo lo preparamos? Poniendo en la bandeja del horno a 200º pimientos y cebollas en juliana, patatas en rodajas con un chorretón de vino durante 10 minutos. Pasado este tiempo, colocamos los lomos de besugo y los dejamos otros 10 minutos. A la vez, podemos hacer un aliño en una sartén a base de ajo, guindilla y vinagre que incorporaremos una vez listo el besugo junto a un poquito de cebollino para decorar. Y para beber, os recomendamos un albariño.
En el lado de la carne, otro mítico visitante de las mesas navideñas es el Roast Beff. Lo acompañamos con un buen tinto, eso lo primero. La elaboración es un poco más complicada pero nada del otro mundo. Con la carne bridada con hilo, la salpimentamos e introducimos al horno precalentado a 160º durante 35-45 minutos con un chorro de aceite de oliva. A mitad de cocción, le damos la vuelta. Y una vez frío, se corta en lámina. De guarnición os recomendamos unas cebollitas especiadas de muy fácil preparación. Sólo hay que dorar unas cebollitas en una sartén con azúcar, Pedro Ximénez, cardamomo, pimienta negra y clavo) y una salsa de pimienta rosa (rehogamos unas chalotas hasta que queden transparentes, las flambeamos con brandy y reducimos con nata, se añade caldo de carne y pimienta rosa para que cueza 10 minutos y después se cuela.
Postres
Frutas, turrones, mazapanes, panettones, tartas, polvorones, un tronco de Navidad y uvas por supuesto en Nochevieja. Aquí la variedad, el gusto del chef y las ganas de seguir comiendo de los comensales se imponen. ¡Buen provecho!