La receta privada llevará un código de barras
Comenzará a expedirse el 21 de enero y será obligatoria para los 45 mil médicos, 26 mil odontólogos y 6 mil podólogos con ejercicio privado en España
La nueva receta común para la sanidad privada va a ser de uso obligatorio antes del verano para todos los médicos, dentistas y podólogos que ejercen en clínicas o consultas particulares. La nueva receta va a tener un código de barras que se desactiva tan pronto el medicamento es dispensado en la farmacia. Con esta nueva receta, aparte de homogeneizar la dispensación, se evitarán las falsificaciones y se podrá hacer un seguimiento exacto del recorrido del medicamento desde el momento de la indicación médica hasta la compra del producto en la botica.
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La nueva receta médica privada, única en todo el territorio nacional, aumentará las garantías de seguridad para médicos, pacientes y farmacéuticos y evitará las falsificaciones, gracias a la incorporación de un código de verificación electrónica (CVE). El nuevo modelo de receta, desarrollado por los consejos generales de médicos, odontólogos y podólogos, pretende contribuir a mejorar el uso adecuado de los medicamentos, ya que según ha recordado en rueda de prensa el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Juan José Rodríguez Sendín, un 15% de las urgencias hospitalarias se deben a un uso inadecuado de fármacos.
Sendín ha asegurado que la nueva receta será válida en toda España y, en un futuro cercano (a finales de año), en cualquier país de la Unión Europea, si bien el Consejo de Médicos de Cataluña se ha desmarcado.En este sentido, el presidente de la OMC ha precisado que el Real Decreto 1780/2010 atribuye a los consejos generales de colegios médicos, odontólogos y podólogos la competencia en exclusiva sobre la receta privada, aunque el consejo autonómico catalán ha emitido un modelo para Cataluña, "que valdrá mientras valga".
Para la ejecución del real decreto se requiere una orden ministerial, que el departamento que dirige Ana Mato está preparando y que, según Sendín, podría estar listo en unos tres meses, por lo que durante ese periodo podrán coexistir la receta nueva y la antigua.
El código de verificación permitirá comprobar a que médico en concreto ha sido asignado un determinado talonario, a qué colegio pertenece el facultativo, cuál es su especialidad y qué medicamento y en qué farmacia se ha dispensado. Esto permitirá, en caso de que fuera necesario, anular una receta o un lote por motivos terapéuticos o en casos de pérdida o robo.
El presidente del Colegio de Médicos de Badajoz y miembro del Observatorio de la Prescripción de la OMC, Pedro Hidalgo, ha incidido en las garantías de seguridad que ofrece la nueva receta sobre su autenticidad. "Hasta ahora era relativamente fácil falsificar una receta", ha asegurado el doctor Hidalgo, quien ha precisado que se trata principalmente de medicamentos que tienen salida en el mercado negro, como ansiolíticos, opiáceos, analgésicos fuertes y derivados de la morfina.
La receta incluirá, además de los datos del prescriptor, los del paciente (incluido el DNI) y datos del medicamento. Cada receta será válida para un solo fármaco. El farmacéutico validará la receta mediante la lectura del código de barras (que la anulará para futuros usos) y la mantendrá en custodia durante tres meses.