Los "éxitos" económicos de Mario Monti
Los indicadores económicos denotan el fracaso de su política
Pese a su fama de técnico solvente, durante su mandato la economía italiana se ha desplomado. El paro ha aumentado más que ningún otro año de la crisis, la inversión empresarial se ha hundido, la deuda pública no ha parado de subir y el déficit se ha reducido menos de lo previsto.
El desastre electoral de Mario Monti ha llevado a concluir que gobernó de espaldas a la voluntad popular, porque fue prácticamente impuesto por Bruselas y Berlín, y que por eso las urnas le han castigado pese a su capacitación técnica y sus éxitos económicos. Los datos no confirman esos "éxitos económicos" del tecnócrata, sino todo lo contrario.
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El año antes de que Monti llegara al poder, Italia tuvo un exiguo crecimiento. Su Producto interior Bruto aumentó sólo el 0,4 por ciento. Un mal resultado que con Monti en el poder, fue a peor: la economía se desplomó el 2,2%.
En 2011 la inversión de las empresas iba mal. En ese ejercicio cayó un 1,1%. ¿Qué ocurrió durante el mandato de Monti? El desplome fue absoluto. La confianza empresarial y su incapacidad para conseguir dinero, llevaron a que la inversión cayera un 12,3%. En este caso, no era sólo la desconfianza popular, era también la paralización empresarial.
El empleo, la prueba de toda mejoría económica. En 2011 se logró crear muy poco empleo, tan sólo 25.000 puestos de trabajo. Pero al año siguiente, el año de Monti, no sólo no se repitió ese modesto resultado sino que la destrucción de empleo fue enorme, 323.000 empleos menos. Y era sólo el principio. Para este año, con las mismas políticas "técnicas" la Comisión Europea espera una destrucción de empleo mayor.
El paro. En 2011, antes de Monti, representaba el 8,4% de la población activa. En el año de Monti, creció hasta el 10,6%, lo que supuso 550.000 parados más. Y lo peor es que la Comisión Europea pronostica que, con las mismas políticas, el paro suba en este año y en el siguiente.
Sin embargo, el éxito que se atribuye a Monti por encima de ninguno es la reducción del déficit público. Antes de llegar al poder, el déficit estaba en el 3,9%, y se había ido reduciendo paulatinamente en 2010 y 2011. Los fuertes recortes aplicados por Monti le llevaron a una reducción de tan sólo un punto, dejándolo en el 2,9 por ciento. En cualquier caso, un logro menor del 2% que esperaba que Bruselas que se redujera.
La temida deuda pública, con Monti ha aumentado. De representar el 120% del PIB a suponer el 127%. Y para este año se espera un nuevo incremento.
En cuanto al castigo de los mercados: la prima de riesgo. Al llegar Monti al Gobierno, estaba disparada, en 492 puntos básicos. Tras sucesivos vaivenes, en julio de 2012 -en la mitad de mandato de Monti- volvió a dispararse hasta llegar a un nivel parecido, en los 488 puntos básicos. Sólo la decisión de su compatriota Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, de comprometerse a comprar deuda de los países con problemas, consiguió que descendiera.