La Vega y la Campiña sevillana vigilan sus arroyos por la crecida del Guadalquivir
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) habla de una situación de "preocupación" por la tesitura en la que se encuentran los pantanos de su cuenca. En Sevilla están al 100% Melonares, Gergal, José Toral y El Agrio.
El posible riesgo de inundaciones podría afectar a los terrenos agrícolas de la Vega y a puntos del Aljarafe que se verían anegados por la crecida de sus arroyos. La previsión habla de hasta 60 litros por metro cuadrado en un periodo de ocho horas, lo que hace que los dispositivos de Protección Civil estén alertas.
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La CHG mantiene activado el protocolo de desembalses preventivos desde el 22 de febrero. A día de hoy, la situación no es motivo de alarma, si bien admite que sigue al detalle la evolución meteorológica, que, según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), está determinada por la entrada de una masa de aire escandinavo que es la que está produciendo estas precipitaciones.
Sin embargo, todas estas previsiones van a depender del agua que caiga y, sobre todo, cómo caiga: si la lluvia es escalonada -que caiga primero en Sevilla y luego en Córdoba- y sin grandes trombas, no habría una situado de alerta. En cambio, si llueve a la vez en las tres provincias afectadas y con una cantidad importante, el panorama sería más preocupante.
La localidad que si ha declarado la prealerta, después de haber sufrido inundaciones el sábado pasado, es Ëcija, ya que los trabajos de encauzamiento del arroyo Argamasilla quedaron el año pasado paralizados por falta de fondos. Ayer, su alcalde, se reunió con el delegado de Agricultura, Pesca y Medioambiente para que se iniciaran de inmediato las labores que impidan definitivamente más episodios de anegaciones como las vividas por su población.
