Los Lakers cierran la temporada con otro esperpento de partido

Pau Gasol y Kobe Bryant, que apareció con sus muletas en el tercer cuarto, los únicos que dan la cara en un duelo marcado por la expulsión de Howard en el tercer cuarto por una dos técnicas.

Punto y final a la peor temporada los Lakers en la última década. Los angelinos dicen adiós a los playoffs a los que tanto les costó llegar durante la temporada regular. La aparición de Kobe Bryant, que entró apoyado con sus muletas en el tercer cuarto, la bronca de Howard con su jefe de los Lakers tras su expulsión y ver la primera fila del Staples vacía antes del final, imágenes de un año para olvidar en Los Ángeles.

El partido tuvo poca historia, solo fue un párrafo más en el libro de la temporada de los Lakers. Un libro que a buen seguro se esconderá en el lugar más oscuro de la biblioteca de los Lakers, una franquicia que se las prometáa muy felices en octubre con el inicio de la temporada pero que ha visto como el sueño del anillo se ha tornado en pesadilla.

Nunca estuvieron en el partido los de D'Antoni. San Antonio, curtido en mil batallas, tan solo tuvo que aprovechar la endeblez defensiva local para ir comiendo poco a poco la moral del público del Staples Center. Parker andaba a sus anchas entre la defensa de Lakers, que hacía aguas por su falta de intensidad y de concentración. El partido fue un paseo, más si cabe después de la expulsión de Howard. El que se supone, si renueva, es el jugador elegido para liderar a los Lakers del futuro sigue demostrando que su capacidad física es inversamente proporcional a su capacidad mental. Con dos técnicas perfectamente evitables D12 se fue a la ducha antes de tiempo para poner así el punto y final una temporada malísima.

El único momento de cierta alegría en el Staples lo provocó, quién si no, Kobe Bryant. La estrella lesionada de los Lakers aparecía de nuevo para despedir la temporada de su equipo desde el banquillo. En el peor momento de los Lakers Howard decidió irse con su segunda técnica y Kobe decidió sentarse con sus muletas en el banquillo. Esa fue la imagen del partido.

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La otra la dejó Pau Gasol, el mejor de Lakers (16 puntos y 8 rebotes), cuando, a falta de tres minutos, fue sustituido. El Staples se puso en pie a aplaudir al de Sant Boi en lo que parecía una despedida como jugador de los Lakers. Hasta Kobe se puso de pie para darle la mano y abrazar a su amigo Pau, que parece tener lejos de Los Ángeles su futuro el próximo año.

Al final el resultado fue de 103-82 gracias en parte a la bondad de los Spurs, que nunca pisaron el acelerador y no quisieron hacer más sangre de un rival ya herido. La temporada ya es historia para los Lakers, el curso baloncestístico 2012-13 quedará como ese año que podía haber sido pero nunca fue.