El sueño europeo del Fenerbahçe Ulker pasa por la cabeza de Zeljko Obradovic

Despues de un año sabático, Zeljko Obradovic ha decidido volver a los banquillos con la misión de convertir al millonario Fenerbahçe Ulker, en el próximo campeón de Euroliga

Ocho son los títulos de la máxima competición europea que dan fe de la categoría de este magnífico entrenador. Obradovic comenzó su andadura en la temporada 1991-1992, en el mítico Partizan de Belgrado. Un año antes, como jugador del propio equipo, tuvo que tomar la decisión más complicada de su vida. Dar o no dar el salto a los banquillos. Aún siendo uno de los mejores baloncestistas del país, Obradovic decide apostar por la dirección. En el verano del 91, el nuevo técnico serbio renuncia a la llamada de Dusan Ivkovic para jugar el Europeo de Roma. No acude con su selección, por aquel entonces Yugoslavia, y se centra en su nuevo cometido con tan sólo 31 años. El inexperto entrenador se hace con las riendas del Partizan, el mismo año en que el país vive el momento más convulso de su historia: el comienzo de la Guerra de los Balcanes. Una guerra que marcaría para siempre el futuro del baloncesto balcánico.

En su primer año como entrenador, Obradovic sorprendentemente gana la Euroliga con unas circunstancias muy adversas. La FIBA había prohibido al Partizan jugar en su país, debido al peligro del conflicto bélico. El equipo serbio eligió España como alternativa y más en concreto Fuenlabrada, donde disputó toda la fase de grupos. El pabellón fuenlabreño Fernando Martín acogió al conjunto del Partizan como si de su propio equipo se tratase. La afición se volcó con ellos incluso frente a rivales españoles, lo que le valió muchas críticas. El conocido como 'Partizan de Fuenlabrada', llegó a la final de la Euroliga disputada en Estambul y venció al Joventut de Badalona. Una final decidida por un triple sobre la bocina de Sasha Djordjevic. 70-71 para el equipo medio yugoslavo, medio fuenlabreño; mientras la carrera de Obradovic comenzaba a rodar.

En los siguientes años, el joven técnico logró dos nuevos títulos continentales. Ya afincado en España, Zeljko Obradovic ganó el primero con el propio Joventut y un año más tarde, el segundo con el Real Madrid. Todo ello antes de que surgiera la etapa dorada del técnico serbio. Zeljko Obradovic recaló en el Panathinaikos griego en 1999 donde dejó un recuerdo imborrable. Consiguió convertir al equipo del trébol, en el gran dominador de la primera década del siglo XXI. Ni el CSKA de Moscú, ni el Maccabi israelí consiguieron hacerle sombra. Obradovic hizo de los helenos un equipo campeón, con cinco entorchados.

Volviendo a la actualidad, el Fenerbahçe Ulker ya había dado un golpe de timón la temporada pasada, en busca del salto a la élite europea. Fichó a golpe de talonario para su proyecto a Bo McCalebb, Romain Sato, David Andersen y a Mike Batiste, además del técnico Simone Pianigiani, ex del Montepaschi Siena. Pero el italiano fue incapaz de lograr los objetivos que se esperaban en Turquía. El Fenerbahçe no accedió siquiera a los cuartos de final, entre los 8 mejores. Poco premio el 'Top16' para un inversión millonaria.

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Obradovic con este fichaje, frena los rumores que le colocaban en un banquillo de la NBA. Muchos fueron los equipos que sonaron, sobre todo Detroit Pistons, para hacerse con sus servicios. El serbio de 53 años, que habría sido el primer europeo en entrenar a un equipo de la liga norteamericana, no aceptó la mayoría de las ofertas porque reclamaba plenos poderes de decisión. Una capacidad de liderazgo que sí tendrá en el equipo turco. Se presenta un candidato muy serio para la próxima Euroliga.