10 cruceros con plazas libres en agosto
Pensando en los indecisos que aún no tenéis decidido dónde ir de veraneo este agosto, en Cadena Ser Viajes hemos preparado una lista con diez barcos que aún cuentan con camarotes disponibles para el mes que viene. Cruceros por el Mediterráneo, por el norte de Europa e incluso por ríos en el corazón del continente, para que os sintáis como el mismísimo capitán Merrill Stubing; sí, el de Vacaciones en el Mar.
Las primeras propuestas que os vamos a dar tienen un marcado sabor mediterráneo. Los cruceros por el “mar en el medio de las tierras” (traducción literal del latín, “Mar Medi Terraneum”), son un clásico desde hace ya varias décadas.
En esta ocasión, la propuesta consiste en salir de Barcelona y dirigirse a La Goulette, el puerto principal de Túnez, la capital del país homónimo –en otro tiempo conocido como Tunicia-. Una capital marcada por la mezcla cultural de diferentes pueblos mediterráneos que han ido pasando por aquí, como los turcos, malteses, y sobre todo los sicilianos –forzados al exilio por el presidente Bourguiba en 1964-. La Goulette puede presumir de ser el lugar que vio nacer a la actriz italiana Claudia Cardinale.
Después de tener este primer contacto con el norte de África, el viaje continúa hacia Italia, donde se realizan tres paradas fundamentales para tener una primera aproximación al país en forma de bota. La primera en Civitavecchia, el puerto de la región de Lacio, 80 km. al noroeste de Roma, una ciudad única en historia y que bien vale unas cuantas visitas. Las siguientes paradas son en el puerto de Livorno, desde donde se visitan Florencia y Pisa, y por último Génova, situada al norte de Italia, en la región de la Liguria. Una ciudad más desconocida que las anteriores, pero que sorprende por su patrimonio, y sobre todo por lo bien que empastan sus casas con el mar.
Antes de llegar al destino final en la Península, el barco hace una parada en uno de los lugares más emblemáticos de la Costa Azul francesa: Niza. Una ciudad con un bonito paseo marítimo -"Promenade des Anglais"-, y desde donde se puede hacer una rápida excursión a Montecarlo, a tan sólo 14 km. El lujo y el glamour están garantizados.
Opción 1: Crucero Mediterráneo Occidental, desde Barcelona
En el caso de elegir como opción de salida Valencia, las paradas de Niza y Livorno (Florencia\Pisa), se sustituyen por Marsella y Barcelona. Se elija la que se elija, ambas son buenas maneras de empaparse de lo mejor de la cultura mediterránea.
Opción 2: Crucero Mediterráneo Occidental, desde Valencia
Para aquellos que prefieran navegar por el Mediterráneo oriental, tienen tres opciones más. La primera combina Atenas, algunas islas griegas (Santorini y Mykonos), Estambul y la costa turca (Izmir y Marmaris); una segunda posibilidad, consiste en combinar Roma, Sicilia (Messina), Suda (isla de Creta), Atenas, y Kusadasi (en la costa turca); y por último, si se quiere abarcar más Mediterráneo, se puede escoger la opción de partir de Barcelona, recorrer la Costa Azul, con parada en Niza, bajar toda la costa italiana echando el ancla en Livorno, Roma y Nápoles; subir todo el mar Adriático dirección norte hasta Venecia, para después retornar hacia el sur, parando en Dubrovnik y en la ciudad montenegrina de Kotor.
Opción 3: Atenas e islas griegas + Estambul y costa turca
Opción 4: Mediterráneo Oriental - Italia, Grecia y Turquía
Opción 5: Mediterráneo Oriental - Niza, Italia, Croacia y Montenegro
Las más de 1.000 islas que salpican todo el litoral de la costa croata y las aguas cristalinas santo y seña del mar Adriático, son suficiente justificación para hacer un crucero por la costa croata. En esta ocasión, el viaje comienza volando a Zagreb, la capital de Croacia, desde donde se toma un autobús hasta Zadar, una bonita ciudad costera de 85.000 habitantes. Desde ahí, el crucero zarpa hacia el Parque Nacional de Kornati, un archipiélago compuesto por 147 islas, la mayoría colonizadas por el salitre y los arrecifes. En Kornati se realizan un par de paradas, retomando el viaje hacia Trogir, una sorprendente ciudad amurallada Patrimonio de la Humanidad, y posteriormente hacia Split, ciudad con mucho encanto, y que tiene en el Palacio de Diocleciano su punto fuerte. El crucero se remata con tres paradas en tres de las más bellas islas de la costa dálmata: Bra?, Hvar y Kor?ula.
Opción 6: Costa Dálmata
Bélgica, y sobre todo, los Países Bajos, son naciones resquebrajadas por el mar en ríos, afluentes y canales. Una región donde la navegación fluvial se lleva practicando desde tiempos inmemoriales. El crucero que os proponemos comienza en Amsterdam, una ciudad más conocida por los coffeshops, los porros, y las luces rojas, que por sus verdaderos encantos -no digo que los anteriores no lo sean-. Tras un par de días en Amsterdam, se continúa hasta Rotterdam, el mayor puerto industrial del norte de Europa; desde donde se prosigue a Gante, una deliciosa ciudad de la región de Flandes en la que relajarse y disfrutar del paseo por las calles de su centro histórico. Para rematar, y antes de llegar a Bruselas, se hace una parada en Amberes, en donde se ha de visitar la estatua de Silvio Bravo, en la Grote Markt (Plaza Mayor), para conocer el origen del nombre de la ciudad.
Opción 7: Bélgica y Países Bajos
El otro crucero fluvial que os proponemos es un clásico: navegar por el Danubio, el río más mítico de Centroeuropa, y el segundo más largo del continente, tras el Volga ruso. El viaje arranca en Budapest, la capital húngara, desde donde tras un par de días se comienza a remontar el río hasta la ciudad austriaca de Linz. Entre medias se pasa por varias poblaciones de Hungría como Estzergom, y por capitales como Bratislava y Viena. Es un crucero muy completo para llevarse una primera visión de algunos países de Europa Central, ya que el viaje se completa con una extensión en autobús que incluye la visita a Cesky Krumlov y Praga, en la República Checa.
Opción 8: Crucero por el Danubio
Para rematar con nuestra lista de recomendaciones crucerísticas, os dejamos otras dos alternativas, ambas por el norte de Europa. La primera consiste en un crucero por los fiordos noruegos. Comenzando en Trondheim, se navega dirección sur pegados a la escarpada costa noruega, haciendo paradas en ciudades como Alesund, Bergen y Stavanger, y en fiordos como el Geiranger, hasta llegar a Malmö (Suecia), donde finaliza el crucero. Este recorrido también se puede hacer a la inversa, desde Malmö subir hasta Trondheim.
Opción 9: Crucero por los fiordos noruegos
La otra posibilidad, es realizar un crucero por el Báltico, con paradas en ciudades como: San Petersburgo, Tallin, e incluso Berlín, a la que se llega tras anclar el barco en Warnemunde, el puerto más cercano a la capital alemana.
Opción 10: Crucero por el Báltico