Francisco Camarelles : "La industria del tabaco tiene mucho interés en los cigarrillos electrónicos porque es una forma de que los cigarrillos sigan en la vida de muchas personas"
El experto universitario en tabaquismo y vicepresidente del Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo (CNPT) considera no hay pruebas científicas de la validez de los cigarrillos electrónicos
La venta de cigarrillos electrónicos se ha triplicado en los dos últimos años, ¿les sorprende?
En estos momentos estamos asistiendo a un aumento importante de la venta de pitillos electrónicos. Este hecho puede deberse a que hay una elevada conciencia social de los peligros para la salud de fumar cigarrillos, y al intento de buscar alternativas al consumo de tabaco. Además hay una estrategia comercial muy importante que hace que en nuestro país están proliferando las tiendas de cigarrillos electrónicos. En este negocio incipiente no es ajena la industria del tabaco. Muchos consideramos que la industria del tabaco tiene mucho interés en los cigarrillos electrónicos porque es una forma de que los cigarrillos sigan en la vida de muchas personas, y de perpetuar la presencia social del consumo de tabaco. Los cigarrillos electrónicos podrían ser también una forma de introducir a los jóvenes en el consumo de tabaco.
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Diferentes colectivos médicos llevan años denunciando que no es una alternativa al tabaco y que incluso puede resultar peligroso. ¿Por qué? ¿Porque algunos contienen nicotina?
En primer lugar hay que decir que hay cigarrillos electrónicos que contienen nicotina, y otros que no. Incluso los que contiene nicotina tiene diferentes concentraciones. Con respecto al cigarrillo electrónico hay tres cuestiones que plantearse: su eficacia, su seguridad y su utilidad para ayudar a dejar de fumar.
Se ha llegado a decir que algunos modelos contienen sustancias que pueden ser perjudiciales para la salud, al margen de la nicotina. ¿Está demostrada su no inocuidad como en el caso del tabaco?
La seguridad de los cigarrillos electrónicos está en duda. La Food and Drug Administration FDA de USA está analizándola.. Tenemos algunos estudios que analizan los efectos sobre la función pulmonar de los cigarrillos electrónicos, que son preocupantes. Recientemente la OMS ha alertado en un comunicado de que no hay pruebas sobre su seguridad
Pero hay quien insiste en que no es un mal método para dejar de fumar. ¿Realmente puede funcionar?
Diversos estudios han investigado su eficacia; el publicado en 2011 en el American Journal of Preventive Medicine concluye que pueden ser eficaces para dejar de fumar. Otro estudio llega a la conclusión de que el uso del cigarrillo electrónico puede reducir el consumo de tabaco en fumadores que no quieren dejar de fumar. Son pocos los estudios realizados sobre la eficacia para dejar de fumar y/o disminuir el consumo de tabaco mediante los cigarrillos electrónicos, por lo que no hay suficiente evidencia científica para recomendar su uso.
En algunos países se le están poniendo trabas... Italia los prohíbe en las escuelas, ¿Y aquí? Habría queprohibirlos? ¿Legalmente se podría hacer ahora mismo?
En Europa la situación varía según los países. Algunos los prohíben, otro los permiten. Actualmente se está discutiendo la Directiva Europea de los Productos del Tabaco en el parlamento Europeo, y una de sus posibles normas afectaran a la regulación de los cigarrillos electrónico. Necesitamos que los cigarrillos electrónicos se regulen a nivel europeo. Desde la profesión médica se está pidiendo esta regulación. Por ejemplo en una artículo reciente de la revista JAMA. Desde el CNPT pedimos tres cosas:
1. No debe ser considerado como un producto comercial ordinario.
2. Si se permiten en el mercado, deben ser regulados.
3. Si se comprueba su eficacia científicamente como un método para dejar de fumar seguro y efectivo, debe tener una licencia como un producto médico por la Agencia Europea del Medicamento