'Lui', la revista mítica del erotismo francés vuelve a los quioscos
Una revista dirigida "a este mamífero viril y romántico, obsesionado por las mujeres y amigo de los gays"
La portada del semanario con el título 'Léa Sydoux se levanta el velo' es una foto de la actriz a la que el público ha visto ya desnuda en su última película premiada 'la vida de Adèle'.(LUI.FR)
París
La que fuera la primera revista erótica de los setenta en Europa, Lui, está ya en los quioscos de Francia. Bajo la dirección del excéntrico realizador y escritor Fredéric Beigbeder, esta resucitada Lui va dirigida "a este mamífero viril y romántico, obsesionado por las mujeres y amigo de los gays", señala en su editorial. En declaraciones a los medios, el director ha añadido que tiene "vocación rebelde, impertinente y de libertinaje, pero es también feminista y busca los amantes de objetos caros". Ahí es nada.
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La portada del semanario con el título 'Léa Sydoux se levanta el velo' es una foto de la actriz a la que el público ha visto ya desnuda en su última película premiada (que se estrena en octubre) 'La vida de Adèle'. Y ocupa el reportaje fotográfico central de 14 páginas firmado por Mario Sorrenti con pluma de Beigbeder.
Con textos profundos como "Léa Seidoux forma parte de esas mujeres cuya belleza da miedo, cuando la vemos pensamos que nos hará sufrir", el autor de El Amor dura tres años trata de desvelar los secretos de la actriz, de "extrema timidez". La galardonada con la Palma de Oro en Cannes apenas cuenta algún detalle, pero se refiere al rodaje (junto con Adèle Exarchopulous) como "agobiante, no teníamos ninguna comodidad, ni maquillaje, salvo las prótesis para sexo falso, en silicona. Era humillante!",
La revista incluye también en el primer número artículos sobre la relación entre la crisis financiera y el consumo de cocaína, un "retrato" sobre la portavoz del Gobierno francés, Najat Vallaud Belkacem, con ropa, y una entrevista con Daniel Filipacchi, el fundador de Lui en 1963, que surgió como réplica europea a la estadounidense Play Boy.
Cuando se le ha preguntado qué interés tiene comprar una revista centrada en desnudos femeninos cuando abundan y son gratis en internet, Beigbeder ha respondido que en los setenta "Lui era una excusa cultural e intelectual para comprar fotos de mujeres desnudas", pero que "ahora preconizamos lo contrario", para destacar la "ambición intelectual" y la calidad de las plumas y fotógrafos como el citado Sorrenti y Chris Morris.
Con una primera tirada de 350.000 ejemplares cargada de publicidad (que no se ha agotado en sus dos primeros días ni en quioscos muy céntricos como los de los Campos Elíseos), el semanario se vender a 2,90 euros.
