Bermúdez cierra el caso Publio Cordón

El titular del juzgado central de instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, Javier Gómez Bermúdez, cierra la investigación sobre el secuestro y muerte del empresario zaragozano Publio Cordón, raptado por el GRAPO en 1995, y procesará a José Antonio Ramón Teijelo por homicidio terrorista. El magistrado entiende que no hay pruebas que incriminen a Vicente Sarasa, Manuela Ontanilla y María Victoria Gómez Méndez, los otros tres miembros de la organización terrorista detenidos por la Guardia Civil en julio de 2012 en relación con estos hechos.

El procesamiento es inminente. Dieciocho años después de que el empresario fuera secuestrado mientras hacía footing en Zaragoza, el juez de la Audiencia Nacional, Javier Gómez Bermúdez, cierra las investigaciones, según fuentes jurídicas consultadas por la Cadena SER, y pedirá que sea juzgado un único miembro del GRAPO, José Antonio Ramón Teijelo, acusado de homicidio terrorista o alternativamente de la detención ilegal del empresario con desaparición sin dar razón de su paradero, según las mismas fuentes.

Los investigadores no han hallado pruebas en el piso franco de Lyon donde permaneció secuestrado el empresario, ni en el resto de indicios analizados, de la participación en los hechos de Vicente Sarasa, Manuela Ontanilla y María Victoria Gómez Méndez, que también fueron detenidos entre el 19 y el 20 de julio de 2012 por la Guardia Civil. Una operación que fue anunciada en rueda de prensa en el Congreso de los Diputados por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, quien afirmó que con las detenciones, el crimen de Publio Cordón quedaba "definitivamente esclarecido" a "expensas de la aparición del cadáver".

Sin rastro del empresario

Las fuentes jurídicas consultadas confirman que el magistrado dictará el auto de procesamiento sin que haya sido encontrado el cadáver del empresario aragonés. La Guardia Civil y la Gendarmería francesa han realizado entre "7 y 8" búsquedas concienzudas en los bosques de Mont Ventoux (Francia), donde el GRAPO arrepentido Silva Sande sostuvo que habían enterrado el cuerpo. A pesar del despliegue de medios humanos y técnicos, con el empleo incluso de un gradómetro de protones, los expertos no han hallado ni rastro de Publio Cordón, por lo que de momento descartan un nuevo operativo de búsqueda.

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El empresario Publio Cordón fue secuestrado el 27 de junio de 1995, en Zaragoza, mientras practicaba 'footing' por las inmediaciones de su domicilio, por los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO).

El industrial zaragozano murió a los 15 o 16 días de haber sido secuestrado, supuestamente tras sufrir un accidente al intentar huir del piso-zulo de Lyon donde permanecía apresado. La banda enterró el cuerpo en algún lugar de la Provenza francesa pero decidió cobrar igualmente el rescate. En este sentido, se citó en París con la familia de Cordón el 9 de agosto de 1995, que entregó a los terroristas un total de 400 millones de pesetas (algo más de 2.4 millones de euros), para que fuera liberado.

Cinco GRAPO condenados por el secuestro

En noviembre de 1995 fueron detenidos los GRAPO Enrique Cuadra Echeandía, José Ortín y Concepción González, y fueron condenados en 1998 por la Audiencia Nacional a 27 años de cárcel cada uno por el secuestro del empresario, mientras que Fernando Silva Sande fue procesado en rebeldía porque no pudo ser detenido hasta noviembre de 2000. Silva Sande, jefe del 'Comando Central de los GRAPO', fue condenado en 2007 a 28 años de prisión por un delito de detención ilegal. Un año más tarde confesó que él mismo había enterrado al empresario, que murió a consecuencia de una caída tras intentar fugarse por una ventana en la casa donde estaba retenido, pero no ha sido posible encontrar el cuerpo.

En abril de 2009, el Tribunal Supremo, estimando parcialmente un recurso interpuesto por la familia del empresario, condenó a Manuel Pérez Martínez, alias 'Camarada Arenas' a 7 años de cárcel como autor por omisión de un delito de detención ilegal porque tenía poder de mando y no dio orden de liberar a Cordón.