Los fiscales también claman contra el régimen de sustituciones del Gobierno

Más de 200 miembros de la carrera fiscal han firmado una carta dirigida al Fiscal General del Estado en la que piden una reacción ante la eliminiación de los fiscales sustitutos por parte del Gobierno, denunciando un "colapso con irremediables consecuencias para el ciudadano". Una protesta que se extiende a la mayoría de asociaciones de fiscales y que alega un aumento de la carga de trabajo para los fiscales.

La protesta generalizada desde el mundo de la judicatura a los nuevos regímenes de sustitución aprobados por el Gobierno se ha extendido a la carrera fiscal: 200 fiscales han firmado un documento dirigido al Fiscal General del Estado, Eduardo Torres-Dulce, en el que piden que revise esta nueva normativa de sustituciones de la que, según explican, "ya se empiezan a percibir sus graves disfunciones y las previsibles e irremediables consecuencias para el ciudadano".

La nueva legislación aprobada a finales del año pasado incluye la eliminación de los fiscales sustitutos, salvo en bajas superiores a seis meses, estableciendo que deben ser los propios fiscales los que deben cubrir las bajas de sus compañeros, con una remuneración del 80% "dentro de las disponibilidades presupuestarias". Una nueva regulación que según explican generará un "discutible ahorro".

Los 200 fiscales firmantes, pertenecientes al Foro de Fiscales creado en la red social Facebook, muestran su "grave preocupación" por esta medida ya que, en su opinión, aumenta la carga de trabajo que debe soportar cada fiscal, "retrasos, suspensiones y aplazamientos al no disponer de una bolsa de sustitutos" que según explican "ya se empiezan a percibir" y que suponen "una disminución ostensible en la calidad de nuestro trabajo y, por tanto, en el servicio al ciudadano". En su escrito, los más de 200 fiscales firmantes creen que "en estas condiciones, es imposible prestar un servicio público de calidad en un tiempo razonable".

Una medida que "perjudica la dignidad profesional"

Para los firmantes, esta es una normativa que deja un mensaje implícito: que los fiscales sustitutos no trabajan todo lo bien que se puede trabajar. "Perjudica nuestra dignidad profesional", afirman recordando que durante el año pasado hasta un 15% de los asuntos fueron despachados por fiscales sustitutos. "Un servicio prestado en estas condiciones no hará sino empeorar la ya pobre imagen de la justicia".

Los fiscales firmantes también apuntan a que esta medida afecta a la especialización de los fiscales: "Es difícil defender la especialización de la carrera fiscal si en el momento en que hay alguna baja se considera que cualquiera es apto para suplirla". Con estos razonamientos, los fiscales piden al Fiscal General del Estado que tome en consideración esta eliminación de los sustitutos y disponga "los medios económicos y marcos normativos necesarios para garantizar una digna prestación del servicio esencial de la Administración de Justicia".

"Lo va a sufrir el ciudadano: no salen las cuentas"

Es una queja que se extiende a casi todos los sectores de la carrera fiscal desde los primeros anteproyectos, pasando por el propio Fiscal General del Estado. En declaraciones a la Cadena SER, el presidente de la Unión Progresista de Fiscales, Álvaro García, cree que esta eliminación de los fiscales sustitutos pone sobre los hombros de los fiscales más carga de trabajo: "Hay más procedimientos y cada vez más complicados, y hay que trabajar más con menos personas", algo que en su opinión va a producir "una merma en la calidad, el que va a sufrir es el ciudadano, no salen las cuentas con más trabajo entre menos personas".

Miedo a que no se paguen las sustituciones

La nueva normativa impulsada desde el Ministerio de Justicia contempla que los fiscales que se hagan cargo de estas sustituciones cobren una retribución del 80% del total, un pago sujeto, según especifica el Real Decreto 700/2013, a las "disponibilidades presupuestarias". Para García, existe un miedo en la carrera fiscal a que estas sustituciones terminen por no pagarse por falta de presupuesto, señalando además que el ahorro programado (1.7 millones de euros según Justicia) "no es significativo, la excusa es profesionalizar la justicia pero en realidad quieren abaratarla".

El portavoz de la UPF señala que los sustitutos internos se eliminan salvo en casos como las bajas de más de seis meses, lo que deja fuera de las excepciones a la mayoría de bajas por maternidad: "Tienen que ser los propios compañeros, no hay una persona que venga a ocupar ese puesto". Las esperanzas de que el Fiscal General del Estado, Eduardo Torres-Dulce, se plante frente a esta nueva situación de, según denuncian, "colapso", son pocas.

Un nuevo decreto llega a manos del Consejo Fiscal

Un decreto que prácticamente borra del mapa a los fiscales sustitutos y que desde algunos ámbitos de la carrera judicial es definido como "negrero", pero que todavía no tiene cerrados sus últimos flecos. El próximo miércoles, los miembros del Consejo Fiscal tendrán encima de la mesa la nueva modificación propuesta por el Ministerio de Justicia en materia de sustituciones en la carrera fiscal: un proyecto de Real Decreto aprobado por el Consejo de Ministros y que introduce algunas modificaciones en reglamento de sustituciones en la carrera fiscal. Tras su previsible aprobación, se restringirá el campo de acción de los abogados fiscales sustitutos, se refuerza la idea de que los fiscales sólo deben ser sustituidos por otros fiscales, y no por sustitutos, además de abrir la puerta a que la figura del "Fiscal Emérito" pueda realizar también funciones de sustitución.