Joan Rosell: "No veo la independencia de Cataluña por ninguna parte"

El presidente de la patronal CEOE, Joan Rosell, ha manifestado este martes su posición sobre la posible independencia de Cataluña de la forma más clara de lo que lo que lo había hecho hasta ahora. Y su opinión es muy desfavorable: "Yo soy de la opinión de que es mucho mejor juntos. La posible, hipotética independencia de Cataluña yo no la veo por ninguna parte, ni desde el punto de vista práctico ni desde el teórico. Yo creo que se saldaría con un destrozo importante de las relaciones humanas en Cataluña y en España, y de una manera todavía más importante en cuanto al tema económico".

El líder de los empresarios, que fue presidente de la patronal catalana entre 1995 y 2011, había reconocido previamente que el sentimiento independentista en Cataluña iba al alza y que esa situación le parecía "preocupante", pero hasta ahora no había expresado de forma tan vehemente su oposición a una eventual separación. "Yo creo que la mayoría de catalanes ni nos queremos ir ni nos vamos a ir, y que creemos que hay que apostar porque mejor juntos", explicaba este martes Rosell en un desayuno informativo en Madrid, "pero eso lo hemos de empezar a decidir entre todos, lo hemos de poner encima de la mesa, lo hemos de explicar y hemos de unir a los sentimientos la realidad de las cosas".

Rosell ha insistido más veces en que la mayoría de las poblaciones de Cataluña y del resto de España están por el diálogo, y ha atribuido la radicalización de los discursos a la actuación de una minoría: "Los que aquí [en Madrid] se pasan de la raya y los que allá [en Cataluña] se pasan de la raya son los que más salen en los medios de comunicación, los que más chillan, los que más gritan, y al final lo que estamos poniendo en boca de muchos son actitudes extremas, de aquí y de allá. Y eso yo creo que no es lo que piensa la mayoría de la ciudadanía, ni la española ni la de Cataluña", resumía.

La solución, el diálogo

Para Rosell "estamos todavía a tiempo" de reconducir la situación, para lo que propone -como suele hacer- diálogo y por poner cifras sobre la mesa. Hablando ya en general de los problemas del estado autónómico, cree Rosell que hay que abordar el debate "de frente, con números, con toda la información -ahora se habla de las balanzas fiscales-, pongamos toda la información encima de la mesa, vemos lo que tenemos y lo que podemos tener", decía.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Sus recetas en este sentido pasan por garantizar que todas las comunidades dispongan de la misma proporción de recursos en lo que son sus gastos clave (sanidad, educación y dependencia, que representan "el 60% de sus presupuestos", dice Rosell), que con el resto den "los servicios que quieran dar", y que se opere un sistema de "solidaridad entre los territorios más ricos y los más pobres". También piensa que habría que reformar el Senado para convertirlo en una auténtica cámara autonómica. Luego, paradójicamente, ha añadido que los empresarios más que opinar sobre la situación política han de "informar": "qué es lo que hay, cuáles son los números, cuáles son las ventajas e inconvenientes, si estas cosas son posibles... lo que están haciendo los empresarios en Escocia e Inglaterra, que ponen encima de la mesa argumentaciones económicas, que no políticas; las políticas las ponen los ciudadanos", concluía.