Rajoy ofrece "una solución dialogada" frente "al contrato de adhesión" de Mas

El presidente del Gobierno lleva ya muchos meses repitiendo lo mismo y hoy no tiene previsto salirse ni una coma del guión. El Ejecutivo dará un portazo a la consulta soberanista de Artur Mas al tiempo que le ofrece hablar dentro de la Constitución. Ayer, en un acto económico, Rajoy decía que "sinceramente" esperaba llegar a "una solución dialogada" y se mostraba convencido de que la situación en Cataluña podría terminar resolviéndose siempre que no fuera desde planteamientos maximalistas.

A Rajoy nunca le han gustado los órdagos. Y nunca ha ocultado lo que le molestó enterarse de la fecha del referéndum y de las preguntas por los medios de comunicación y no por el president de la Generalitat. "¿Tenemos que decir que sí? Eso se llama un contrato de adhesión. No voy a entrar en consideraciones jurídicas ni de otro tipo", reprochaba a Mas mientras defendía que hoy en el Congreso se vivirá "un debate clarificador".

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Rajoy ensalzará lo que une a españoles y catalanes, resaltando que estamos unidos incluso "por lazos de sangre". A su juicio se puede discutir sobre todo, incluso sobre si el modelo de financiación es o no el adecuado, pero cree que "uno no puede ser pequeño", cuando precisamente se está viviendo un proceso de integración a nivel mundial.

En 2005 Rajoy le dijo a Ibarretxe que estaba reclamando algo ilegal. Ahora, desde la Moncloa piensan que pueden calcar el discurso. "Creo que debemos hacer todos un esfuerzo, que debemos sujetarnos a la ley y que estas cosas se resuelven dialogando, no tomando decisiones unilaterales y luego planteándoselas a los demás", será en resumen su mensaje.

En el Gobierno creen que, a pesar del rechazo parlamentario, nada va a cambiar y que Mas seguirá en sus trece. Aunque lo que más les preocupa es que siga creciendo el sentimiento independentista.