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La unidad de Rehabilitación del Hospital de La Paz no pasa por su mejor momento. La maquinaria para realizar ejercicios de recuperación no ha sido renovada en muchos años. De las dos piscinas que deberían estar en funcionamiento, solo hay una con agua y para atender los ejercicios en el agua y los tratamientos con parafina (terapia de calor húmedo para tratar dolores) solo hay un monitor.

Ester Quiñones, secretaria de Comisiones Obreras en La Paz, señala la falta de inversión como la principal culpable del deterioro de las máquinas y la reducción de personal. "Con un solo monitor no puedes tener a dos o tres personas con discapacidades físicas sin atención en la piscina", añade.

Otro problema añadido es la saturación de la listas de espera. Diariamente, no se atiende ni a la mitad de los pacientes que podrían pasar por estas instalaciones y en muchos casos tienen que esperar hasta dos o tres meses. "