Revés de la justicia a dos expedientes abiertos por la guardia civil a dos agentes que presuntamente hablaron con Interviú

Nuevo revés de la justicia a la Dirección General de la Guardia Civil. Los tribunales han echado por tierra los expedientes disciplinarios que hace casi 4 años se abrieron contra dos dirigentes de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) por unas supuestas declaraciones que hicieron a la revista Interviú. Ellos siempre han negado haber hecho estas declaraciones. Para la Asociación Unificada de la Guardia Civil las sentencias del Tribunal Militar y del Supremo demuestran "la arbitrariedad con la que los agentes son sancionados por denunciar las condiciones en las que trabajan".

Los tribunales han echado por tierra los expedientes disciplinarios que hace casi 4 años se abrieron contra dos dirigentes de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) por unas supuestas declaraciones que hicieron a la revista Interviú.

Los dos guardias civiles fueron sancionados a raiz de un artículo publicado en la revista "Interviú" el 30 de agosto del 2010. El artículo se titulaba "Un día de huelga con la Guardia Civil" y relataba la huelga de bolis caidos que realizaron agentes de la Guardia Civil presuntamente ante la merma de sus derechos laborables. Según la AUGC el reporaje pretendía dar una visión global de la situación y problematica del Cuerpo y para ello una redactora de la revista acompañó a una patrulla de guardias del servicio de Agrupación de Tráfico.

Ellos siempre han negado haber hecho declaraciones pero la Dirección General de la Guardia Civil consideró que tanto el secretario general como el jurídico de la AUGC habían sido los autores de unas declaraciones que aparecían en el reportaje. Por eso les abrió un expediente disciplinario por falta muy grave "al haber participado en huelgas, en acciones sustitutivas de las mismas o en actuaciones concertadas con el fin de alterar el buen funcionamiento del servicio" y por falta grave ya que hicieron "reclamaciones o peticiones con publicidad a través de los medios de comunicación".

Ahora lo que dice el Supremo y lo que dijo en su día el Tribunal Militar es que el Director General de la Guardia Civil "carecía de la objetividad que de él se esperaba por cuanto ya tenía conocimiento del contenido del expediente sancionador y además tomó postura sobre el mismo".

Los dos agentes han estado suspendidos de empleo y sueldo desde agosto del 2011 hasta ahora.